El Córdoba CF, al contrario que la mayoría de los clubs españoles, aún no se plantea un ERTE. La entidad blanquiverde asegura que esa opción no está sobre la mesa, al menos por ahora, a pesar de que lo invertido por Infinity se sitúa en la actualidad en torno a los seis millones de euros. Mensualmente, el fondo de inversión ha de acometer un pago de más de 400.000 euros de los que el 90% corresponden a sueldos, tanto de la primera plantilla como de empleados. Por lo tanto, incluyendo el recién finalizado mes de marzo, el fondo bareiní ha desembolsado más de 1,6 millones de euros -en realidad, cerca de los dos millones- solo en ese concepto. Hay que añadir, además de otros gastos imprevistos, el millón de euros que debió depositar el pasado mes de diciembre para desbloquear los derechos federativos y acometer otros pagos que no se contemplaban inicialmente, como fue el que debió realizar a Viasport, entre otros.

Y, por supuesto, los tres millones de euros que se depositaron en la cuenta del Juzgado de Lo Mercantil para lograr la unidad productiva del Córdoba CF.

Pero si la factura hasta ahora es notable para Infinity, el horizonte cercano no se vislumbra más despejado con el actual panorama, completamente paralizado por la crisis del coronavirus. Entre abril, mayo y junio, la entidad blanquiverde deberá afrontar las mismas mensualidades, que supondrán cerca de los 1,5 millones de euros adicionales a los que habría que añadir otras tantas cantidades pendientes que continúan saliendo. La última ha supuesto una reclamación de cerca de 170.000 euros, que Clínicas Beiman ha reclamado en la RFEF, por lo que el organismo federativo ha abierto un expediente al Córdoba CF para dirimir si dicha deuda corresponde a deuda deportiva o no. En caso de señalarla como deuda deportiva, la entidad blanquiverde volvería a tener los derechos federativos bloqueados, problema que estuvo rondando en la pasada ventana invernal de fichajes.

Por lo tanto, más allá de cómo termine la temporada, tanto en lo deportivo como en lo institucional, la factura para el fondo Infinity en el Córdoba CF puede irse a una cifra cercana a los ocho millones de euros. Luego, tanto los juzgados como la RFEF dirimirán qué ocurre con el Córdoba CF, con Infinity o sin él.

Porque en caso de que la Liga se reanude, obviamente la fecha del 30 de junio queda obsoleta, por lo que habría que remitirse a semanas después de que termine la competición propiamente dicha, es decir, que el aspecto reglamentario con el organismo federativo se podría decidir no antes del próximo verano.

Además, antes de llegar a ese paso habrá que comprobar cuándo toma posesión del Juzgado de Lo Mercantil el magistrado que releve a Fuentes Bujalance, ya que el TSJA, al igual que la mayoría de órganos judiciales y de los propios tribunales, se encuentra paralizado. Así, todos los pasos legales, tanto judiciales como federativos, se prolongarán seguro en el tiempo. Mientras, la factura de Infinity en el Córdoba CF, continuará aumentando.