Bien conocido es que el Córdoba CF Córdoba CFse ha convertido en los últimos años en una trituradora de entrenadores. Pero, igualmente, el club blanquiverde lleva varias temporadas sin lograr estabilidad en su plantilla. Carente de un proyecto armado en torno a pilares básicos sobre los que construir un equipo competitivo. Sin embargo, más allá de esa inestabilidad, lo que en cierta medida escuece en la afición blanquiverde es que jugadores que salieron del club por falta de minutos o de confianza triunfen en el fútbol profesional lejos de El Arcángel.

El caso más sintomático, visto en los últimos días, es el del central Josema Sánchez. Un futbolista ciertamente particular, que “se tiene que sentir importante” y del que “hay que estar pendiente”. Con “cualidades para jugar en Primera” pero con el que hay que “hacer mucha labor” fuera del campo, según explicó hace año y medio el que fue su director deportivo en el Sochaux francés, David Vizcaíno.

Un Elche plagado de exblanquiverdes

Tras llegar al Córdoba CF en el verano del 2017, Josema apenas disputó 12 partidos antes de salir cedido al Sochaux al siguiente año y, finalmente, rescindir su contrato en el verano del 2019. Tras pasar por el Nástic y por el Extremadura, sin apenas minutos en ambos clubs, parecía que a sus 24 años su carrera languidecía. Sin embargo, ahora, está a punto de jugar el play off División con el Elche.

Firmó en enero como agente libre por el club ilicitano y, desde entonces, es fijo en los esquemas del técnico Pacheta. Forma dupla de centrales con otro excordobesista, Gonzalo Verdú, que pasó por la cantera blanquiverde. Al igual que Manuel Sánchez, veterano pivote cordobés que no encontró hueco en el club de su tierra y que ahora pelea por jugar en la élite nacional.

Fidel celebra un gol con Xisco en su etapa en El Arcángel. / A.J. GONZÁLEZ

Pero Josema no es el único excordobesista que triunfa ahora en el Elche. Fidel, que formó un ataque de ensueño con Florin Andone, Xisco y Pedro Ríos, ha superado los 2.300 minutos con el equipo levantino.

A falta de solo cuatro partidos para el final de la temporada en Segunda, el Elche de Fidel, Verdú, Manuel Sánchez y Josema defiende con uñas y dientes el sexto puesto y sueña con las eliminatorias de ascenso a Primera, categoría que no pisa.

Cádiz y Almería, a un paso de jugar en la élite

Pero el Elche no es el único club que pelea por subir a Primera con excordobesistas en sus filas. El Almería, plagado de fichajes formidables para la división de plata y con un proyecto regado de petrodólares, tiene en Sergio Aguza a un futbolista importante en el centro del campo. Aunque el ascenso directo parece ahora inalcanzable, aún hay opciones matemáticas. Y el play off parece seguro para el Almería de Aguza. Un futbolista que salió libre del Córdoba CF hace dos años.

Aguza, precisamente en un partido de los blanquiverdes ante el Almería. / EFE

Pero si hay un caso paradigmático de futbolista que no daba el nivel esperado en el club blanquiverde y que ahora pelea desde un papel protagonista para jugar en la élite del balompié nacional, este es el francés Yann Bodiger. El pivote llegó a El Arcángel en el invierno del pasado 2019 para tratar de enderezar una nave que estaba ya condenada al naufragio. Empezó como gran estandarte en el centro del campo y acabó siendo habitual suplente de Rafa Navarro.

Ahora, en indiscutible líder de Segunda, Bodiger coincide en la medular del cuadro de Álvaro Cervera con otro exblanquiverde, Edu Ramos. Un futbolista que no pudo ser inscrito en la 2018/19 por los problemas del límite salarial que tantos quebraderos de cabeza dieron en aquel verano y que ahora podría regresar a la élite.

Elche, Almería y Cádiz. Tres clubs que pueden servir de espejo al Córdoba CF. Ilicitanos y gaditanos, de hecho, saben lo que es morder el polvo de la Segunda B y, en pocas temporadas, están en disposición de regresar a Primera. Los almerienses, por su parte, tienen en la propiedad a otro jeque, el saudí Turki Al-Sheikh. Modelos que pescaron en su día del caladero blanquiverde para armar proyectos con los que soñar con lo más alto. Y que generan una lógica y sana envidia en la parroquia blanquiverde, que ve triunfar lejos de El Arcángel a los que aquí no encontraron hueco o continuidad.