De pelear por ascender a Primera a luchar en el fango de la Segunda División B. El Córdoba CF y el Real Murcia se enfrentaron por última vez en El Arcángel hace más de 5 años, en junio del 2014, en la ida de la primera eliminatoria del play-off de ascenso a Primera. Desde entonces, ambos clubs comenzaron su declive, fulminante y permanente en el caso de los pimentoneros, y con el oasis del ascenso a Primera y más lento para los blanquiverdes. Este sábado se reencuentran a las 18.30 horas en el mismo escenario pero en un contexto muy diferente.

Aquel partido acabó en empate a cero, el Córdoba CF logró pasar a la eliminatoria final en la Nueva Condomina, donde venció por 1-2 al Real Murcia. Lo que llegó después en Las Palmas ya es historia. Como historia fue el descenso administrativo del equipo murciano semanas después por impagos y problemas económicos. La caída a Segunda B fue inminente y, desde la temporada 2014/15, nada como puede en el lodazal del grupo IV de la división de bronce.

Aquellos laureles de la pelea por regresar a la máxima categoría quedan muy lejanos. Ninguno de los 11 titulares o de los siete suplentes del equipo por entonces entrenado por el Chapi Ferrer continúan en la disciplina blanquiverde. Este periódico tituló "Con la ilusión intacta" la crónica del empate ante los pimentoneros en un El Arcángel con 14.000 espectadores y en el que el palo, en el minuto 91, impidió la victoria por la mínima. Sería bonito decir que esa ilusión permanece en el cordobesismo. Señales ha dado la leal y paciente afición blanquiverde de que continúa teniendo fe. Solo 3.000 hinchas menos de los que acudieron al último Córdoba CF-Real Murcia, 11.000, son los abonados que tiene ahora el club.

Una temporada iniciada hace dos semanas y en la que, a falta de buen juego e incluso de control de los partidos, suma ya cuatro puntos, tres más que el Real Murcia. Si el Córdoba CF afronta un curso en Segunda B 12 temporadas después de su última experiencia de bronce, distinto es el pasado reciente de los pimentoneros.

El Real Murcia suma su sexta temporada consecutiva en Segunda B. En las cinco anteriores, logró promocionar al ascenso en las cuatro primeras, cayendo siempre en el mismo grave problema de esta categoría, las eliminatorias de ascenso. El equipo pimentonero vive una situación acuciante, con una deuda multimillonaria, quitas a proveedores e inyecciones de capital. Incluso montó la campaña «SOS Real Murcia», logrando que personajes influyentes se hiciesen accionistas para poner su granito de arena.

El Córdoba CF se enfrenta este sábado a los murcianos con una clara idea en el club. Ascender a las primeras de cambio para mejorar la situación económica y evitar que el fango se convierta en un lodazal de años.