El Córdoba repite rutina. Al igual que en la pasada temporada después de la llegada de los refuerzos invernales, la entidad blanquiverde anunció ayer que la plantilla blanquiverde se concentrará a partir de mañana en Jerez, concretamente en Montecastillo, en donde permanecerá hasta el viernes, día en el que los 18 convocados y el cuerpo técnico viajarán desde Sevilla hasta Tenerife, en donde le espera el equipo chicharrero el sábado, a las 20.00 horas, en el Heliodoro Rodríguez López.

Mañana martes está prevista una sesión de entrenamiento a las 17.00 horas, mientras que el miércoles se prevé una doble sesión, a las 10.30 y a las 17.00 horas, para finalizar el jueves, con otro entrenamiento a las 10.30 horas.

La plantilla se marcha mañana a Montecastillo y vuela de Sevilla a Tenerife el viernes

La concentración se venía sopesando desde hace días en la entidad blanquiverde, que ha estimado que es más necesaria que nunca, debido a la cantidad de incorporaciones en el mercado invernal de fichajes, siete, de las que dos, Álex Carbonell y Álex Menéndez, han llegado hoy a la ciudad para entrar ya en la dinámica del equipo. También ha tomado mayor relevancia ante la derrota del sábado ante el Albacete, lo que ha dejado a Curro Torres en una posición más que comprometida, de ahí que el club ofrezca al cuerpo técnico todas las posibilidades disponibles para intentar revertir la situación. El partido en el Heliodoro Rodríguez toma, por tanto, un aroma a final para el de Ahlen, que debe buscar la reacción definitiva del conjunto blanquiverde, que con los recién llegados cambiará la cara por completo en la próxima jornada, ya que casi medio equipo podría estar conformado por las nuevas incorporaciones.

Antes del viaje de mañana, la plantilla blanquiverde realizó una sesión de recuperación ayer, en la ciudad deportiva. Álvaro Aguado ya está disponible para el técnico blanquiverde, aunque también estuvo en Camino de Carbonell el director deportivo del Córdoba, Rafa Berges, que charló con Curro Torres durante el mismo y también cuando finalizó el entrenamiento.

Curro Torres necesita una victoria y los siete fichajes invernales, acoplarse al resto del equipo

A nadie se le escapa que el de Ahlen vive su momento más delicado desde su llegada a la entidad blanquiverde, hace algo más de dos meses. En las 10 jornadas ligueras con él al frente, el Córdoba ha firmado derrota en la mitad de las mismas y solo ha sumado un triunfo, aquel 4-1 ante Las Palmas, a final del 2018 que confirmaba la lenta recuperación del equipo. Sin embargo, las vacaciones navideñas no sentaron bien, ya que cuando se perfilaba la confirmación de dicha recuperación ante dos rivales directos como el Nástic en Tarragona y el Rayo Majadahonda en El Arcángel, el Córdoba solo pudo sumar uno de los seis puntos en juego.

Más allá de las valoraciones tácticas y de rendimiento, lo más preocupante -junto a la situación clasificatoria- en este Córdoba es la debilidad anímica y la falta de confianza, todo expueso ante el Albacete, equipo ante el que encajó tres goles en tan solo seis minutos. Ahora tocará concentrarse solo en el fútbol. Y ganar la final de Tenerife.