Luis Miguel Carrión ha hablado este mediodía sobre el duelo del próximo domingo ante el Mirandés (18.30 horas), una auténtica final para el Córdoba que, si bien llega con una buena racha en casa (13 puntos obtenidos de los últimos 15 disputados), también lo ha hecho con un mal que volvió a dar la cara en Mallorca, en donde los blanquiverdes recibieron 11 disparos (de un total de 18) en la última media hora de partido. El técnico blanquiverde ha asegurado que “lo he analizado todo, el otro día vi una estadística de los goles". Para el catalán "son diferentes motivos, hay una parte de todo", aunque admitió que "bajamos físicamente" y también que el equipo "se siente atenazado por el resultado". El preparador blanquiverde aseveró que "intento salir a ganar todos los partidos. No me gusta empatar. Si veis mi carrera, habré empatado muy pocos partidos porque no me gusta. Un punto no suma nada". Pero reconoció que "intentaremos mejorar eso, llegar de la mejor forma posible al final", ya que "no me gusta y no creo que sean casualidades", admitió.

Sobre el adversario, Carrión ha avisado de que el hecho "de que sea colista no significa que vaya a ser fácil ni mucho menos. He visto los partidos desde que está Pablo Alfaro y el equipo ha competido muy bien. El otro día hicieron un buen partido contra el Zaragoza, con muchas llegadas, y no va a ser nada fácil, a pesar de que sea el colista".

Finalmente, Carrión habló de la enfermería. "Piovaccari está evolucionando muy bien, incluso por delante de los plazos esperados. Caballero va bien y no sé si lo tendremos disponible para la semana que viene. Los demás todos bien".