La reacción del Córdoba en esta temporada 2017/18 tiene varios nombres propios, empezando por la nueva propiedad y presidente de la entidad blanquiverde, Jesús León, pasando por el director general deportivo, Luis Oliver, y pasando por hombres de la plantilla que han tomado el timón. Jugadores, algunos, que ya estaban en el plantel y otros que llegaron en el mercado invernal de fichajes. Entre unos y otros: Kieszek, Sergi Guardiola, Aythami o el mismo José Antonio Reyes.

Pero también hay un nombre propio que destaca tanto o más que los anteriormente mencionados: José Ramón Sandoval. El técnico blanquiverde ha trabajado, principalmente, el aspecto mental de una plantilla que no se destacaba, precisamente, por tener en lo psicológico su fortaleza. Como ejemplo, baste la segunda parte en el Nou Estadi, con un Córdoba metido en su campo y aguantando las embestidas del Gimnástic de Tarragona para dejar su portería a cero por segunda jornada consecutiva, algo que no se había logrado en toda la temporada.

Ese cambio se ha reflejado en los números para la permanencia, ya que de estar a 11 e incluso llegar a situarse a 13 puntos de la salvación, Sandoval ha conseguido que el Córdoba, en un mes, esté tan sólo a cuatro puntos. Es decir, el Córdoba ha logrado meterse de lleno en la lucha por continuar en Segunda División.

Las diferencias de estas primeras cinco jornadas del actual técnico blanquiverde en el banquillo con las cinco primeras de sus tres antecesores en el cargo son brutales. Luis Miguel Carrión logró seis puntos en las cinco primeras jornadas de Liga, justo la mitad de las logradas por Sandoval. Su equipo anotaba 1,4 goles por partido, pero encajaba 1,6. En esas primeras cinco jornadas de Liga, el Córdoba estaba en el puesto 13, con dos puntos sobre el descenso, a dos de las eliminatorias de ascenso y a cuatro del ascenso directo.

El relevo de Juan Merino resultó un fiasco. El linense intentó inculcar una mentalidad más defensiva al Córdoba, pero aunque sí que encajó algo menos fue a costa de olvidarse de atacar. Sumó dos puntos en sus primeras cinco jornadas (seis veces menos que Sandoval), anotó 0,4 goles por partido y encajaba el triple: 1,2. En su particular Liga, Merino tenía al Córdoba colista en sus primeras cinco jornadas.

Con Jorge Romero la cosa mejoró algo, aunque menos de lo que transmitían las sensaciones, influidas por el juego rácano de su antecesor. El parecido con Carrión se reflejaba, incluso, en los números. Sumó en sus primeras cinco jornadas dos puntos menos que Carrión, cuatro. Encajó 1,6 goles por partido (igual que el catalán) y anotó 1,8 goles a favor, algo más que el primer técnico de la temporada, aunque esa cifra, muy mediatizada por aquel 5-0 al Reus. De hecho, el Córdoba de Romero anotó en sus primeras cinco jornadas 9 goles a favor, de los que más de la mitad se anotaron en aquel encuentro. En su particular Liga, Romero se hubiera situado en el puesto 19, en descenso, con los mismos puntos que la salvación, a cinco de las eliminatorias y a siete del ascenso directo. Los números de Sandoval fulminan a sus antecesores. Estaría situado en el cuarto puesto de la tabla tras el triunfo sportinguista del lunes en Huesca, teniendo el descenso, en su particular Liga, a nueve puntos (ver gráfico).

UN BANQUILLO MUY COSTOSO / Para colmo, el coste de los diferentes banquillos que ha tenido el Córdoba hasta la llegada de Sandoval ha sido notablemente costoso. Es de dominio público cómo afectaron aquellos 100.000 euros de Carrión al límite salarial en el mercado invernal en una maniobra de la anterior propiedad, que también dejó pendiente la reclamación de Juan Merino y su segundo, Rafa Pichardo, que suma 275.000 euros, según informó este periódico. Además, queda pendiente la petición de Jorge Romero, al que le quedaban dos temporadas más y que cuando fue ascendido al primer equipo se le equiparó su ficha a la de Carrión. Por lo tanto, la reclamación del ya extécnico blanquiverde se sitúa en torno a los 300.000 euros. En un somero repaso incluyendo el coste de Sandoval, el banquillo blanquiverde podría salir esta temporada en una cifra superior a los 800.000 euros. Más de tres cuartas partes, obviamente, responsabilidad de la anterior propiedad.

RÉCORD A LA VISTA / Pero en lo meramente deportivo, Sandoval tiene un récord histórico que igualar, el próximo sábado. Tanto en Primera, como en Segunda y en Segunda B, sólo dos entrenadores han sumado cinco victorias consecutivas en Liga en los últimos 56 años. Lo hizo Roque Olsen con el equipo que subió a Primera en la temporada 1961/62 y algo más recientemente lo firmó Pepe Escalante en la 2000/01. En aquella ocasión, la racha de cinco victorias finalizó con aquel empate a uno en el Calderón ante el Atlético de Madrid, que dio paso a una derrota en casa ante el Elche.

Pero vista la reacción de este Córdoba con Sandoval, pocos dudan de que el de Humanes puede entrar en la historia el sábado.