Lo definió bien Enrique Martín en la previa. Los filiales son equipos peligrosos, con futbolistas con hambre, con ganas de destacar y de hacerse un nombre, y que ven en El Arcángel, un estadio de solera, un escaparate ideal para brillar y demostrar su juego. Por ello, y más aún tras la derrota hace una semana en el campo del Sevilla Atlético, la visita esta tarde del Cádiz B (18.00 horas, Footters) es un encuentro bastante más difícil y complejo de lo que podría parecer simplemente por nombre e historia de ambas escuadras.

Y es que este Córdoba CF ha demostrado en el arranque liguero que no se le dan bien dos tipos de equipo: los recién ascendidos y los filiales. Y el Cádiz B es ambas cosas a la vez. De hecho, el conjunto de Enrique Martín debutó en Liga con victoria sobre la bocina ante el Granada B, un equipo que se adelantó en el primer minuto del primer minuto al que ganó con un penalti anotado en el descuento.

¿A la tercera va la vencida?

Los blanquiverdes, posteriormente, fueron incapaces de rascar una victoria en Villarrubia de los Ojos ni en Yecla ante dos equipos que la pasada temporada militaban en Tercera. Y hace una semana, encajó su primera derrota del curso liguero ante otro filial, el Sevilla Atlético. Así, el Córdoba CF tiene su tercera oportunidad para vencer a un recién ascendido y, a la vez, desequilibrar el balance de una victoria y una derrota ante los filiales del grupo IV de Segunda B. El segundo equipo cadista tiene a dos futbolistas cordobeses, el lateral izquierdo Carlos Cobos (21 años, Córdoba capital) y el delantero centro Manu Nieto (21 años, Villa del Río). Ninguno de los dos son titulares indiscutibles en el esquema del técnico Juanma Pavón, aunque Nieto ya se ha estrenado como goleador esta temporada, precisamente en la última victoria del Cádiz B, en la ciudad deportiva del Sevilla en la cuarta jornada. Nieto marcó el único tanto del partido y desde entonces no ha salido de las convocatorias del filial cadista.

El rival gaditano del Córdoba CF acostumbra a jugar con un sistema similar al usado hasta ahora por Enrique Martín. Su técnico Pavón dispone cinco defensas con un doble pivote por delante, formado normalmente por Duarte y Jordi Tur, dos extremos puros y un delantero. El ariete de referencia del Cádiz B es Seth Airam, un fornido delantero formado en las categorías inferiores de la UD Las Palmas hasta hace dos años, cuando firmó por el filial del Cádiz tras un fugaz paso por el Lorquí murciano.

Por tanto, de no mediar cambio en el sistema de Enrique Martín, habrá un choque de dos equipos con esquemas similares, muchos futbolistas por detrás del balón y especial atención a las jugadas a balón parado y al juego aéreo.