Alejandro González habló para los medios oficiales de la entidad blanquiverde justo antes de celebrarse la junta. El aún presidente del Córdoba hasta el día 22, en el que «habrá el cambio de gobierno si se consuma toda la venta», defendió que «en materia económica -el club- ya estaba totalmente enderezado a mi llegada, sólo hemos seguido con el cumplimiento de nuestros compromisos y el saneamiento de las cuentas, con el que podemos decir que, actualmente, somos uno de los clubes de la LFP con mejores números». El hijo del máximo accionista de la entidad blanquiverde dejó un mensaje solo a parte de su masa social, ya que aseguró sobre esta que «solo podemos estar contentos con la gente que nos ha apoyado y que nos ha permitido trabajar», en clara referencia al sector crítico que se ha ido generando entre la afición durante los años que ha durado la era González, aunque posteriormente añadió que «no tenemos nada que reprochar absolutamente a nadie».

Posteriormente se celebró la junta de accionistas que, ante la negativa a que entraran los accionistas minoritarios fue, básicamente, una reunión del consejo de administración, cuyo secretario es Andrés Delgado. Con el presidente, González Sánchez-Quiñones e Iván Zaldúa, este último, el hombre fuerte en materia legal del Córdoba en el último año. Tanto, que todo el proceso de compra venta a Jesús León y Luis Oliver se ha producido en su despacho, situado en la calle Velázquez de Madrid. También asistió Sergio Medina, único consejero que se mantiene desde la llegada de Carlos González a Córdoba. Será la última comparecencia de todos, ya que si todos los pasos van produciéndose como está previsto, el próximo 22 de enero, el consejo de administración actual dimitirá y entrará el nuevo bajo la presidencia de Jesús León, cuyo número de consejeros, ahora, podría ser diferente al de los seis inicialmente previstos.