Tres de cada diez electores convocados el pasado domingo, 11 de marzo, a las urnas para decidir cuándo se ha de celebrar la Gran Huevada dijeron «no» al cambio de día. Fueron 1.190 los votos escrutados (30,84% del electorado), del que el 70% dijo no estar dispuesto al cambio de fecha y el 30% restante sí. De esta manera, Villafranca celebró durante una concurrida jornada la esperada consulta popular para optar por no cambiar la fecha de la Gran Huevada, que desde sus inicios ha tenido lugar la víspera de la romería de San Isidro Labrador cada 15 de mayo. La controversia surgió cuando hace justo un año el actual equipo de gobierno, que preside el socialista Francisco Palomares, propuso que la Gran Huevada se cambiara al sábado anterior a la romería, argumentando una serie de circunstancias que avalaban dicho cambio, como que podría acudir más gente del pueblo y de fuera, entre otras razones, algo que creó cierto malestar entre algunos grupos de ciudadanos y colectivos.

Aquel domingo de referéndum el pueblo, con sus votos, fue el que dijo cuándo se había de celebrar esta fiesta genuina organizada por el ayuntamiento, en la que se reparten de forma gratuita más de 15.000 huevos fritos con pan y vino, la noche de antes de la romería. A las 14 horas de del citado día ya se habían depositado en torno a 1.000 votos en las dos mesas electorales que se habían habilitado en las salas municipales, de un censo electoral de 3.858. Entre las 12 y las 15 horas fueron numerosos los vecinos los que se acercaron hasta el ayuntamiento para depositar su voto, en un ambiente de fiesta. Tanto la primera hora de la mañana como la tarde fueron más tranquilas. También es cierto que se esperaba una mayor participación, dada la expectación que había levantado.

valoraciones // Rafael Reyes, por ejemplo, dijo a este periódico que votó que sí, «para que la gente tenga tiempo de sobra para coger con ánimos el día 15 la romería, porque cuando se celebra la Gran Huevada el día 14 va mucha gente hecha polvo a la romería, después de estar de fiesta hasta las 5 o las 6 de la madrugada». Por su parte, Juan Isidro Gómez votó que no se cambie «porque la tradición hay que guardarla». Su esposa, Ana Díaz, añadió que «para qué queremos más fiestas, con esta tenemos bastante». También argumentaron que los distintos puntos de vista hay que respetarlos y que no ha habido diferencias a nivel familiar y entre amistades. Remedios Gil votó que sí «porque el día de la Gran Huevada no puedo vivirla porque estoy trabajando en Pedro Abad, aparte de que quiero que venga más gente y quiero vivirla». Francisco Ruiz votó que sí al cambio «porque muchos de los que vivimos en Villafranca trabajamos fuera y también queremos disfrutar de la fiesta en nuestro pueblo». Dolores Navarro votó que sí «para que la disfrute tanto la gente del pueblo como la de fuera». Toñi García votó que no «porque mis tíos vienen de 1.000 kilómetros a la Gran Huevada y la romería, y si se cambia ya no podrían venir».

En medio de estas diferencias de posturas, el voto del pueblo de Villafranca fue el que tuvo la última palabra, cerrándose a las 8 de la tarde las mesas electorales para dar paso al recuento de los votos de cada una de ellas, y cuyos resultados no se dieron hasta las 21.15 horas.

Al conocer los mismos, el alcalde felicitó a todos los participantes de esta consulta popular y dijo que «hay que respetar la opinión de la mayoría de los villafranqueños, quienes han decidido que se mantenga el 14 de mayo».

En esta guisa, los ciudadanos que acudieron a votar dejaron claras muestras de lo que querían, ya que la gran mayoría decidió que se mantuvieran en esa fecha, lo que hará que también se mantenga la de la romería el día que caiga, como viene siendo tradicional.