-¿Cuándo llega a Villafranca y qué valoración hace de su estancia en esta localidad?

-Llegué a Villafranca en septiembre del 2016, hace exactamente 3 años. Había ascendido a sargento hacía escasos meses y tomar el mando de una unidad supuso todo un reto personal para mí. A ello había que añadir que la mayor parte de mi trayectoria profesional la había desempeñado realizando funciones de la especialidad de resguardo fiscal, por lo que tenía la ardua tarea de ponerme al día en una nueva especialidad como es la Seguridad Ciudadana. Por suerte me encontré con un grupo de trabajo excepcional que estuvo apoyándome en todo momento y, gracias a mismos compañeros, logré sobreponerme a esas dificultades y abordar mi trabajo con normalidad. Lógicamente este es un trabajo en el que no dejas de aprender y aún a día de hoy sigo aprendiendo. Hacer una valoración de mi estancia teniendo en cuenta solo el ámbito profesional sería injusto, ya que tanto el Ayuntamiento de Villafranca como toda la ciudadanía se volcaron desde el primer momento conmigo para que me sintiera lo más cómodo posible y cuando llegas a un nuevo destino y te encuentras a unos grandes profesionales como compañeros y todo un pueblo mostrándote su respeto y admiración, ¿qué más se le puede pedir?

-¿Qué opina de la celebración de la festividad del Pilar en este pueblo?

-Antes de estar destinado en Villafranca estuve en el País Vasco y, no se engañe, allí también se celebra la festividad del Pilar, pero lógicamente no es lo mismo. Aquí cada año me sorprendo con el entusiasmo con el que afrontan los villafranqueños los días previos. Ese afán de superación que nos caracteriza hace que cada año nos esforcemos más por mejorar la celebración del anterior y eso el pueblo lo sabe. De ahí que frecuentemente nos pregunten con qué les vamos a sorprender cada año. Pero no todo el mérito es nuestro, ni mucho menos. Desde el Ayuntamiento se vuelcan con nosotros para enaltecer este día grande, poniendo a nuestra disposición todos los recursos necesarios para conseguir lo que ya es una realidad: que la celebración del Día del Pilar en Villafranca sea todo un referente en la provincia. De ahí es sabido que acuden jueces, magistrados, autoridades militares y un año contamos con la presencia de un marqués. Igualmente, la mayoría de las empresas y ciudadanos colaboran con nosotros y como el esfuerzo es de todos, la celebración es por y para todos.

-¿Qué servicios presta la Guardia Civil a los vilafranqueños?

-Decir que hacemos de todo sería un tanto exagerado, ¿no? (risas). Pues como Unidad Territorial que somos, tenemos funciones propias de seguridad ciudadana que básicamente se resume en garantizar el ejercicio de los derechos de los ciudadanos y garantizar la pacífica convivencia. Ello se traduce en servicios de patrullas, atención al ciudadano para la recepción de denuncias e investigación de delitos. Lógicamente, cuando la complejidad del caso lo requiere, contamos con el apoyo y asesoramiento de las distintas especialidades, bien sea Policía Judicial, Seprona, Tráfico, Intervención de Armas… Pero nosotros somos el primer escalón de contacto con el ciudadano y somos los que atendemos directamente sus requerimientos, de ahí que haya dicho que hacemos de todo. Los ciudadanos no son especialistas en código penal, leyes procesales o administrativas… Saben que tienen un problema y acuden a nosotros demandando una solución. Por eso, en ocasiones asumimos roles de “abogados”, “jueces” y, sobre todo, “psicólogos”. Hay que empatizar con el ciudadano y entender que viene buscando ayuda y, aunque en ocasiones no entre dentro del ámbito de nuestras competencias, hay que informar, tranquilizar y, sobre todo, hacerle ver que su problema va a tener solución.

-¿Qué actos celebraron este año?

-Este año tuvimos un comienzo de celebración muy tempranero, ya que arrancamos el pasado 27 de septiembre con una exhibición de algunas de nuestras especialidades en el recinto ferial de Villafranca, donde acudieron los centros escolares y todas aquellas personas que quisieron conocer un poco mejor y de primera mano algunas de las funciones que desempeñamos por todo el territorio nacional. Continuamos el 3 de octubre con un partido de fútbol sala entre componentes del Ayuntamiento y Policía Local contra Guardia Civil. Idea que surgió el año pasado como un día más de convivencia para resaltar las buenas relaciones que mantenemos. El pasado 6 de octubre hicimos una yincana infantil para variar un poco de la marcha ciclista que hicimos el año anterior. Y, por último, el día 12 celebramos la misa en al Iglesia, por lo que quiero agradecer a nuestro párroco, Eugenio Bujalance, la bendita paciencia que tiene con nosotros y el permitirnos adaptar la liturgia a nuestras necesidades. Después de la misa ofrecimos la copa de vino español para todos los vecinos que quisieron asistir y por último hicimos la entrega de premios y actuaciones musicales. Todo ello hizo que comenzáramos con los preparativos un mes antes, ya que tenemos que compaginar la organización con nuestro trabajo diario.

-¿Qué mensaje envía a los lectores?

-Confianza y tranquilidad. Como bien es sabido, este año es nuestro 175 aniversario y a lo largo de esta trayectoria hemos ido adaptándonos a los cambios y exigencias que la ciudadanía demandaba de nosotros. No en vano somos el cuerpo policial mejor valorado. Lógicamente no voy a negar lo evidente y, claro que se denuncia, pero es una de las potestades que el Estado nos confiere. Imagínese una sociedad en la que cada persona hiciese lo que quisiera y cuando quiera o se toma la justicia por su mano. Pasaríamos de la libertad al libertinaje, donde cada ciudadano actuaría bajo sus instintos. Eso no es propio de un Estado de Derecho moderno. Para poner freno a este tipo de situaciones ha sido necesario articular un mecanismo de defensa y uno de esos mecanismos, lamentablemente, son las denuncias. Pero, rellenar un boletín lo hace cualquiera. Estar dispuesto a entregar tu vida para salvar la de otro es harina de otro costal. Realizar un auxilio, un rescate, un requerimiento y una vez finalizado que un ciudadano te estreche la mano y de dé las gracias por tu trabajo…, eso es lo que realmente hace que llegues a casa con la satisfacción del deber cumplido. Son estas las historias que se cuentan y las que quedan en al memoria. Por ello pido confianza en la Guardia Civil para sacer que somos un Cuerpo Policial al servicio del ciudadano. Que no duden en acudir a nuestros ante cualquier problema y que tengan la tranquilidad de que trabajaremos para garantizar el libre ejercicio de sus derechos y libertades.