En una carpa gigante montada ex profeso para la celebración de la 53ª edición de la Yalsa Salana, celebrada en Alton (Reino Unido) se congregaron casi 40.000 fieles de la comunidad Ahmadía, que confirmaron su continuidad a la misma a través de la celebración del Bait, que partía desde el quinto jalifa, Su Santidad Azrur Ahmad. La expedición española asistente a este encuentro quedó impresionada no solo de la organización, sino de la fidelidad de las decenas de miles de ahmadíes que la siguen ya en todo el mundo. Esta celebración de hermandad, en la que los fieles postran su brazo derecho sobre el hombro de otro hermano, concluye con el llanto de muchos de ellos, que se emocionan solo con participar en este momento tan importante para ellos. Posteriormente tuvo lugar la oración, dirigida por Masrur.

La comitiva española también acudió a ver el mercado, donde los asistentes degustaron productos típicos de Pakistán, de donde procede esta comunidad y donde es perseguida, ya que tiene su propio mesías, cuando las demás comunidades musulmanas están esperando el mesías prometido.

Solo por eso no es reconocida como musulmana, pero no es menos cierto que tiene más de 200 millones de fieles en más de cien países, dado su mensaje de paz y de ayuda a los más desfavorecidos, entre otras muchas más acciones por las que está siendo reconocida mundialmente.