El alcalde de Villafranca, Francisco Palomares Sánchez, valoraba como «un hecho histórico» que un hijo de esta localidad haya alcanzado este importante reconocimiento, «siendo apóstol de Jesucristo en nuestra tierra».

Palomares, que estuvo presente en el acto de ordenación de obispo de don Francisco Jesús Orozco, manifestó que «el pueblo de Villafranca y la comarca del Alto Guadalquivir se sienten dichosos por tener un hijo obispo, siendo, después de varios siglos, un cordobés, algo que nos congratula y forma parte ya de los anales de la historia de nuestra tierra».

También destacó el alcalde villafranqueño los diferentes momentos que se vivieron durante la ordenación de don Francisco Jesús Orozco, valorando las palabras de los obispos consagrantes, así como del nuncio y el calor humano que había en la catedral, «hasta donde se desplazaron cuatro autocares llenos de villafranqueños que no quisieron perderse este acontecimiento histórico».

Por otro lado, Francisco Palomares resaltó «no solo la preparación de don Francisco Jesús Orozco, sino también el cariño y la vocación cristiana que ha adquirido a lo largo de su vida, siendo desde muy pequeño un niño que ha estado vinculado a la iglesia de nuestro pueblo y cuya vocación sacerdotal la adquirió siendo muy joven». También felicita a los padres de Francisco Jesús, así como a su hermana y familiares directos, «que han tenido la suerte de tener un hijo y un hermano entre los elegidos por la Iglesia». Concluye que «además, tenemos la suerte de tener un gran sacerdote, como don Eugenio Bujalance, que está entregado en cuerpo y alma a nuestro pueblo».