El aceite de oliva se encuentra en la actualidad en una importante crisis de precios provocada por el control que ejercen los compradores, el freno de las exportaciones a países como Estados Unidos y las importaciones del producto procedente de países como Túnez o Portugal. Ante esta situación, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, instó este lunes a que España ejerza el «liderazgo» en el sector a través de la adopción de medidas. Planas, en un acto organizado por Radio Córdoba, defendió la puesta en marcha de una serie de acciones que buscan una regulación del mercado, con medidas como el almacenamiento privado o la reforma de la ley de la cadena alimentaria. «Son fundamentales una serie de medidas que contribuyan al encuentro entre la oferta y la demanda», dijo el ministro socialista, que consideró que hay que regular la campaña con el almacenamiento privado «para evitar el efecto tobogán de la evolución de los precios». En este sentido, manifestó que es «una necesidad» la reforma de la ley de la cadena alimentaria y propugnó que los agricultores y ganaderos tengan «una retribución mejor por su trabajo y superior a los costes de producción». Planas dijo que confía en que, antes de finales de octubre, se apruebe la reforma de la ley de la cadena alimentaria, «que será una ley más moderna y de inspiración europea».

Entre sus propuestas defendió el adelanto de la cosecha de la aceituna, «que incrementará los antioxidantes y polifenoles y darán más calidad del aceite». Del mismo modo, instó a tomar medidas para aumentar el consumo en el mercado nacional, pero también en Europa y terceros países. Respecto a los aranceles de EEUU, el ministro de Agricultura estimó que no observa a corto plazo que se vaya a producir una eliminación del arancel del aceite de oliva. «No veo la eliminación de arancel. Esperemos que no se produzca un incremento de aranceles porque el comercio se ha convertido en un elemento político y los conflictos provocados por EEUU y China afectan a la Unión Europea», explicó Luis Planas.

El ministro advirtió también de «algunas prácticas que se están haciendo, como el refrescado de aceite o las mezclas, que están perseguidas, y eso es responsabilidad del gobierno de España y de las comunidades autónomas». El refrescado del aceite de oliva consiste en mezclar aceites antiguos con otros más recientes. Además, Planas reclamó mayor claridad en el etiquetado del aceite de oliva para que el consumidor «esté seguro al 100% que lo que contiene la botella y consume es lo que dice la etiqueta. Eso lo vamos a seguir trabajando y persiguiendo». Precisamente, Planas aconsejó que en el etiquetado se vea reflejado si el aceite procede de un olivar tradicional y que exista una armonización de los paneles de cata.

Con respecto a la reforma de la Política Agraria Común (PAC), el ministro instó al principal partido de la oposición a defender una «unidad de acción con el Gobierno» para unir sus fuerzas por España, y a las autonomías un gran acuerdo político por una PAC 2021-2027 que marcará la agricultura y ganadería españolas del futuro. Precisamente, el Gobierno defenderá esta semana en el Consejo Europeo un marco financiero ambicioso y suficiente. Ha reclamado unidad a las fuerzas políticas, al conjunto del sector y a las comunidades autónomas, una «responsabilidad coral», para iniciar un debate constructivo por el futuro del sector agrario y una participación activa de todos para buscar soluciones.

Plan estratégico nacional

El ministro de Agricultura tiene previsto convocar el próximo 23 de julio a las comunidades autónomas para comenzar el debate sobre la aplicación de la PAC en España a través del Plan Estratégico Nacional. «Se ha realizado una gran radiografía del sector y ahora es necesario alcanzar un gran acuerdo político sobre la PAC», indicó Planas. En este sentido, consideró que se debe «acercar posiciones» sobre quién será considerado agricultor genuino, sobre los ecoesquemas y otros aspectos técnicos, donde la agricultura familiar y profesional será uno de los ejes de la PAC».

El ministro aseguró que España tiene la oportunidad de sentar las bases para la proyección futura de su agricultura y ganadería y del conjunto del sector agroalimentario, ya que dispone de la experiencia y del conocimiento, además de remarcar el lugar central que ocupa el sector en la economía española.