La revolución en el olivar tiene en Córdoba uno de sus centros neurálgicos. La creación de nuevas variedades de olivos, el impulso de procesos de recolección mecanizada o la lucha contra plagas y enfermedades convierten a la provincia en una de las que más están innovando en el sector. Por eso no sorprende que las fincas intensivas y superintensivas de olivar sigan creciendo en Córdoba. Hace pocas décadas era impensable pensar en explotaciones que superasen los mil olivos por hectárea, pero la introducción de nuevos marcos de plantación y variedades adaptadas al cultivo en seto han transformado sustancialmente el olivar por la importante reducción de costes que se produce. Hasta el 2018 había en la provincia 10.154 hectáreas con más de mil olivos por hectárea, siendo superada únicamente por Sevilla (12.778). Además, existían 832 hectáreas con unos marcos de plantación que permitían entre 800 y 1.000 olivos por hectárea y 8.587 que albergaban entre 400 y 799 olivos. Precisamente, es a partir de los 600 olivos por hectárea cuando se habla de olivar superintensivo. No obstante, en la provincia de Córdoba, la mayor cifra de hectáreas tiene entre 140 y 399 olivos (195.044 hectáreas), hay 115.218 hectáreas que albergan entre 80 y 139 árboles y 28.882 hectáreas con menos de 80 olivos.

La implantación de estos sistemas de producción puede ser en pocos años una de las mayores competencias para el olivar tradicional. Al existir más aceite en el mercado, los precios se verán marcados por este factor. La Consejería de Agricultura considera que para que un olivar de secano tradicional sea rentable los precios deben estar muy por encima de los actuales, ya que los costes de producción se sitúan en 2,85 euros por kilo de aceite. Este es el olivar que suele ocupar amplias zonas de Sierra Morena y de las Sierras Subbéticas y que se puede ver muy afectado si no se opta en la nueva PAC por incentivar este tipo de explotaciones por su valor ambiental. En el caso del olivar superintensivo en regadío, los costes descenderían a 1,88 euros por kilo de aceite.