La cooperativa de segundo grado Dcoop, que tiene una importante implantación en la provincia de Córdoba, ha denunciado que está siendo atacada por «bulos y acusaciones sin fundamento» a través de las redes sociales. En un escrito dirigido a socios de las cooperativas que integran la entidad, Dcoop asegura que «no está almacenando aceite importado en las instalaciones del Patrimonio Comunal Olivarero de Montoro», como se está informando en mensajes anónimos de Whatsapp y otras redes sociales. Asimismo, ha recordado que en la última reunión de la sectorial del aceite de oliva de Cooperativas Agroalimentarias de Andalucía, celebrada en Jaén el pasado martes, Dcoop volvió a reiterar su propuesta de prohibir las importaciones de aceite de oliva de terceros países, «pero lamentablemente nadie más se sumó a esta propuesta», según se recoge en la comunicación interna a la que ha tenido acceso este periódico.

El director general de Dcoop y presidente del Patrimonio Comunal Olivarero, Rafael Sánchez de Puerta, ha lamentado esta campaña contra la cooperativa en unos momentos «muy complicados» por la situación de bajos precios del aceite de oliva que vive el sector. «Hay bajas liquidaciones en las empresas, muchas cooperativas tienen aún aceite de la pasada campaña sin vender y los precios están muy bajos», explica Sánchez de Puerta.

En la comunicación dirigida a los cooperativistas, Dcoop advierte sobre cómo detectar un bulo y remarca que está denunciando esas «acusaciones», aunque reconoce que «es un proceso lento y complejo». Otras cooperativas del sector también están siendo objeto de informaciones interesadas sin contrastar a través de anónimos. Dcoop ya ha sido objeto en otras ocasiones de informaciones falsas.

Precisamente, con respecto a los bajos precios, Sánchez de Puerta confía en que en la cuarta licitación de almacenamiento privado se acoja un importante volumen de aceite que contribuya a retirar producto del mercado e impulse la subida del precio en origen.

Durante la semana pasada, la Delegación Territorial de Agricultura situó el precio del virgen en extra en 2,1 euros por kilogramo, lo que supone un 18% menos que hace un año. El virgen cotiza a 1,85 euros y el lampante de base dos grados para su refino está a 1,75. Estos precios, que están por debajo de los umbrales de rentabilidad, son superiores a los que se están registrando en países terceros como Túnez, donde el virgen extra cotiza a 1,70 euros y el lampante a 1,3-1,35, a lo que hay que unir unos diez céntimos por kilo hasta que llega a España.

Los grandes envasadores españoles y de otros países de la Unión Europea, como Italia, han recurrido en los últimos años al conocido como Tráfico de Perfeccionamiento Activo (TPA), que permite importar aceite de oliva para su transformación y exportación a terceros países. Esta práctica está autorizada por la Unión Europea, aunque obliga a que el aceite de oliva no pueda entrar en el mercado comunitario y ha de dirigirse a terceros países en el plazo máximo de seis meses. Dcoop viene reclamando desde hace años que se prohíba la importación de aceite de terceros países, aunque por el momento no ha encontrada respuesta de los envasadores.

España, gran importador de aceite

España, que es el principal exportador de aceite de oliva del mundo, también es un gran importador de esta grasa vegetal, precisamente a través del TPA. Durante la campaña 2018/2019, España importó 141.000 toneladas de aceite de oliva, que llegaron a 164.000 en la campaña 2017/2018, En los primeros tres meses de la campaña 2019/2020, las importaciones de aceite en España ascienden a 44.700 toneladas. Por lo que se refiere a las exportaciones, entre octubre y diciembre se vendieron al exterior 264.500 toneladas.