La secretaria general de los socialistas andaluces planta cara a la dirección general. "Solo se regenera aquello que está degenerado", ha espetado Susana Díaz este martes al secretario de organización José Luis Ábalos a cuenta de dar nuevos aires al PSOE andaluz. "Y yo presido un partido honesto y decente que ha ganado las elecciones con el apoyo de un millón de andaluces". En una entrevista en la cadena SER, Díaz ha considerado que las declaraciones de Ábalos pidiendo regeneración en la federación andaluza del PSOE "se han sacado de contexto", y ha asegurado que Pedro Sánchez le ha transmitido "su cariño" y apoyo "para lo que haga falta".

Díaz ha vuelto a reiterar su intención de trabajar con los otros partidos para intentar formar gobierno al ser la fuerza más votada, aunque ha reconocido que si no tiene los apoyos suficientes no se presentará al debate de investidura solo para ocupar la atención mediática. Pero la mayor carga de sus palabras ha ido dirigida a los miembros de su partido que han encontrado en su debacle en las elecciones la oportunidad para asaltar el fortín andaluz. La líder socialista se ha revuelto contra esta intención, negando que su partido necesite regeneración después de 36 años al frente del poder en Andalucía.

"Lidero un partido honesto, decente y trabajador que ha tenido confianza de un millón andaluz", ha insistido, señalando que no pensó que cuando el PSOE perdió el poder en otros territorios el partido no fuera decente. "Simplemente pensé que alguna circunstancia se habría dado para que no hubiera ganado", ha espetado, aferrándose de nuevo a la mayor fortaleza del partido, seguir siendo la fuerza mayoritaria en la Cámara.

Cataluña

Díaz ha reconocido que "a lo mejor se equivocó" al plantear las elecciones en clave andaluza, dado que Cataluña y los temas nacionales han tenido peso en el resultado de los comicios. En cualquier caso, ha explicado que ella respeta un partido de 139 años de historia y que tras las elecciones "hizo lo que tenía que hacer", que es acudir a la dirección regional a rendir cuentas y someterse a la confianza de sus compañeros, que le "avalaron" para iniciar la negociación para formar gobierno con el resto de fuerzas políticas. "No es habitual cuando se gana, pero es un ejemplo de coherencia y respeto a la organización que lidero, que es un gran partido que en las peores condiciones gana y logra el apoyo de un millón de votantes", ha dicho.

En este punto, Díaz se ha referido a la petición de Ciudadanos de que sean los socialistas quienes les apoyen para formar un "gobierno limpio" y frenar a la ultraderecha. "Por qué tiene derecho el que ha quedado tercero a decir que le voten y no lo tengo yo, que cuento con el aval de cinco años de gobierno decente y sin mancha y con un partido que ha quedado primero?", se ha preguntado, "es un voto de peor calidad el nuestro?

La líder socialista ha vuelto a emplazar a Cs a retratarse y demostrar "que había venido a regenerar la democracia y no a repartirse sillones" apoyando su investidura para impedir que sea la extrema derecha de Vox quien condicione el gobierno andaluz, "un partido tóxico, que va contra la autonomía y la igualdad", y ha calificado ese posible pacto entre PP, Cs y Vox de "pacto de perdedores".