El presidente del PP, Pablo Casado, sostuvo ayer que las elecciones andaluzas son la «primera piedra en la recuperación de España» y reclamó a sus simpatizantes que den «lo máximo» para poder llevar a cabo la «agenda muy ambiciosa de futuro» de su partido. Una agenda que, según dijo en un almuerzo-mitin en El Ejido (Almería), servirá para «pelear por el empleo» y tener buenas infraestructuras, como la alta velocidad para Almería, preguntando en este punto por qué el Gobierno «incumple los compromisos» para la llegada del Corredor Mediterráneo a la provincia. «El cambio solo lo puede ganar el PP. Esa alianza con la que nos echaron de forma vergonzante con la moción de censura solo la puede parar el PP. La dignidad, el fortalecimiento institucional, empieza en Andalucía», dijo.

Casado sostuvo estar «enamorado» de Almería y Andalucía, advirtiendo de que el futuro de ambas está «hipotecado» desde hace cuatro décadas por «malas políticas» y que el pasaporte para el futuro son los candidatos del PP. «También quiero dejar muy claro que en el PP pedimos en cualquier parte de España agua para todos. Planteamos una política de migración responsable, no puede haber papeles para todos, el estado del bienestar no es ilimitado», añadió. Aseguró que en política migratoria pretende lo que ya hizo el PP en los 90, una política regulada, ordenada y vinculada al mercado de trabajo.