Según el pseudopravda global, con los Iñakis de siempre al frente, seguido de los palmeros y de los editorialistas que esconden su nombre en el anonimato, el primer debate de los cuatro aspirantes a presidente del Gobierno lo ganó de calle Sánchez y el segundo, por unanimidad, Iglesias.

Si una falacia tan burda (millones de personas que vieron los debates se preguntarán si tuvieron alucinaciones o les pusieron otra película), qué harán esos muy demócratas, defensores de la verdad, en cuestiones críticas de Estado y qué harán (según ellos ya está hecho, como afirma Tezanos en sus maravillosas encuestas), cuando hayan ganado las elecciones, también de calle, y gobierne (es un decir) el Frankenstein II.

Miren, lo de Sánchez ha pasado de ser una broma sin gracia durante 10 meses de okupa, con amenazas, viajecitos en Falcon y amagos desenterradores, junto a una nefasta gestión de los inmigrantes ilegales a los que abrieron las puertas de par en par, así como un fiasco económico que llevará a una subida de impuestos, directos o encubiertos, para convertirse en una broma de muy mal gusto y, sobre todo, peligrosa, porque Sanchez puede llevar al país literalmente a la ruina, con polvorines separatistas a punto de estallar, dejando deudas "zapaterianas“ de miles de millones por doquier.

Y es que Sánchez no ya es de "perfil“ bajo, si no que no da una mínima talla y sus más que evidentes limitaciones y su narcisismo harán que sea, otra vez, un presidente de paja, insulso, que se contradice a sí mismo, a la vez que, sin saber debatir democráticamente, amenazará a los demás. Sin escrúpulos y solo para salvarse él y su entorno no tendrá reparo en seguir pretendiendo enconar y dividir a los ciudadanos, habriendo heridas antiguas de los horrores (de ámbos bandos) de la guerra civil, con botes de humo desenterradores y poniendo flores en determinadas tumbas, pero no, por ejemplo, en Paracuellos del Jarama, o en las tumbas desconocidas de los miles de fusilados, tras salir a "tomar un café“, en el Madrid republicano durante la guerra, lo cual certifica, una vez más, su especial memoria deshistórica, sus falacias y su ruin carácter.

Para completar el cartel, Iglesias, personaje camaleónico experto en grandes ocurrencias, basó el primer debate en leer artículos de la Constitución, tras estar más que documentado lo que él ha afirmado sobre ella durante años, todo ello dando lecciones de los artículos de la Constitución, pero apoyando a los Otegis de turno, habiendo aireado hace unos dias la bandera independiente de Canarias. Sí, todo muy constitucional, mientras el curita Iglesias daba más lecciones de democracia en el segundo debate.

Y a todo esto salen unos, según ellos, intelectuales, junto a artistas, escritores y otras profesiones (cuya relevancia "intelectual“ y de otro tipo nunca existió o ya pasó hace bastante tiempo), pavoneando un manifesto "Tú decides“, que, está muy en tono con los 110 brindis al sol, y en concordancia de cómo el PSOE y Podemos catalogan de fascistas corruptos a ciudadanos que democráticamente no les darán su voto, siendo ese manifiesto, tal cual Sánchez e Iglesias, cursilero. Sobre todo las últimas frases con "queremos pedir a la España real (?) se movilice el 28 de abril... y llene las urnas de bondad democrática“ son para que a todos y todas se nos salten las lágrimas.