Unos 4.000 tractores y unas 5.000 personas, según fuentes de la Subdelegación del Gobierno, y entre 6.000 y 8.000 vehículos y más de 10.000 agricultores, según las organizaciones agrarias convocantes, participaron ayer en la gran tractorada que el sector agrario protagonizó en la autovía Córdoba-Málaga (A-45) para protestar por los bajos precios que percibe el agricultor y por la difícil situación en general por la que atraviesa el campo. Esta multitud de agricultores y vehículos colapsaron desde las 10.30 horas no sólo la A-45, sino buena parte de las carreteras colindantes, en una jornada reivindicativa que desbordó las previsiones de la propia organización -que prevía tan solo unos 3.000 tractores y el corte de 6 kilómetros de la A-45 sentido Málaga durante un par de horas- y que colocó a Lucena en el epicentro de las movilizaciones que viene protagonizando el sector agrario español en las últimas fechas. En concreto, y tras comenzar a llegar los primeros tractores antes de las 09.30 horas a la explanada del campo de fútbol de Lucena establecida como punto de encuentro, los kilómetros 56 a 62 en sentido Málaga donde estaba prevista la marcha quedaron cortados desde las 10.35 horas, no restableciéndose hasta las 17.45 horas el tráfico con normalidaddesde las 10.35no restableciéndose hasta las 17.45, tiempo en el que fueron circulando por este tramo los miles de tractores participantes. No obstante, no todos pudieron siquiera llegar al arranque de la marcha, debido a que el colapso provocado en todas las carreteras cercanas y algunos incidentes protagonizados por agricultores descontrolados motivaron a la Guardia Civil a solicitar a muchos tractores que se dieran la vuelta minutos antes de las 13.00 horas.

Entre los citados incidentes, y junto a la pequeña quema de neumáticos en la A-318 y en el entorno del campo de fútbol de Lucena, el corte no autorizado que protagonizaron decenas de agricultores que, saltando de sus vehículos, pasaron a pie al sentido contrario en dirección Córdoba de la A-45, a la altura de los primeros metros del recorrido de la protesta, cortando de facto ambos sentidos de esta autovía en torno a las 11.00 horas. Agricultores que una media hora después dejaban de nuevo libre la vía, volviéndose a reagrupar varios metros más arriba cortando durante más de cuatro horas la citada autovía en ambos sentidos, y provocando retenciones kilométricas.

Estos agricultores, procedentes de diversos municipios y cooperativas -aunque el grupo más numeroso y organizado correspondió a olivareros de la cooperativa La Purísima de Priego de Córdoba-, protagonizaron pequeños momentos de tensión cuando la Guardia Civil abrió paso a algunos vehículos particulares con distintas urgencias, así como algunos conductores ajenos a la protesta que, indignados, se acercaron a los mismos para pedirles que dejaran la vía libre. Finalmente, y ante la negativa de abandonar la vía, efectivos antidisturbios -ya presentes en la zona a las 12.30 horas- dispersaban a los manifestantes pasadas las 15.30 horas, tras emplear varias bombas de humo. En sentido Málaga, metros antes del corte sí autorizado, otro grupo de antidisturbios avanzó sin tener que hacer uso de estos medios.

Previamente, el presidente de Asaja Córdoba, Ignacio Fernández de Mesael presidente de Asaja Córdoba,Ignacio Fernández de Mesa, y la secretaria provincial de COAG, Carmen Quintero, intentaron, megáfono en mano, solicitar a estos manifestantes que dejaran la vía libre, así como otros ciudadanos anónimos que se bajaron de sus coches tras horas de espera.

Tras la dispersión de los manifestantes, y la reapertura del tráfico sentido Córdoba con normalidad, algunos agricultores volvieron a corta la cercana A-318, a la altura del kilómetro 44, en torno a las 18.00 horas, cuyo tráfico quedó de nuevo restablecido sin mayores incidentes una hora después, según informó la Subdelegación del Gobierno central. Entre unos y otros, casi 8 horas de cortes.