En el marco de una colaboración de la Asociación Alemana de la Industria del Automóvil, Ford Fordse ha asociado con proveedores de infraestructuras y empresas tecnológicas, como Bosch, para demostrar el gran potencial de los vehículos conectados, que se comunican con la infraestructura de los aparcamientos para encontrar una plaza y, lo más sorprendente, aparcar ellos mismos.

El aparcamiento automatizado permite a los usuarios emplear una aplicación desde fuera del vehículo para enviarlo a una maniobra de aparcamiento automatizada. Esta innovadora tecnología, que todavía se encuentra en fase de investigación y demostración, elimina el estrés que supone para los conductores la acción de aparcar y además, en un futuro cercano podría ampliarse para permitir a los usuarios enviar el vehículo a un túnel de lavado, a una estación de recarga o incluso hacer que se entreguen paquetes al vehículo en el aparcamiento. Ford hará una demostración del sistema Automated Valet Parking en la feria IAA de Múnich, que se celebra del 6 al 12 de septiembre.

En palabras de Joseph Urhahne, Conducción Automática, Investigación e Ingeniería Avanzada en Ford Europa: "La demostración muestra que el aparcamiento sin conductor es una realidad y que los beneficios más amplios van más allá de la comodidad, la conveniencia y el ahorro de tiempo. Ya sea en el aeropuerto, en el centro urbano o en un estadio deportivo, el aparcamiento podría ser pronto mucho más eficiente, con entradas, pagos y salidas sin contacto. Que los vehículos den vueltas sin cesar en el aparcamiento en busca de una plaza adecuada será pronto cosa del pasado".

Una plaza de aparcamiento estándar en Europa mide unos 2,44 metros por 4,88 metros y aunque los coches son cada vez más grandes, muchas plazas de parking continúan teniendo las mismas dimensiones. El innovador Automated Valet Parking podría permitir aparcar hasta un 20% más de vehículos en un aparcamiento sin que se produzcan daños por aparcar demasiado cerca unos coches con otros.

¿Cómo funciona el aparcamiento automatizado?

La tecnología de sensores instalada en el aparcamiento toma el control del vehículo y gestiona todo el tráfico dentro del área de aparcamiento. Esto se consigue a través de una comunicación vehículo-infraestructura.

De este modo, los sensores del aparcamiento reconocen y localizan al coche para guiar su maniobra de aparcamiento. Si la infraestructura detecta algo en la trayectoria del vehículo (un peatón, un vehículo o un peligro), lo detiene de forma inmediata. Al llegar al aparcamiento, el usuario deja el vehículo en una zona designada y mediante la aplicación FordPass se inicia el guiado automático hasta una plaza de aparcamiento libre.

Una vez el coche está estacionado, podría convertirse en un punto de entrega de paquetes personal, permitiendo a las empresas de reparto acceder al vehículo para dejar paquetes en el maletero. En el futuro, podrían desarrollarse más servicios conectados para ofrecer más ventajas al cliente.

Por último, para solicitar la devolución del vehículo a la zona designada, basta con pedirlo en la aplicación FordPass, lo que agiliza la experiencia de recogida y permite al conductor y a los pasajeros entrar cómodamente en el vehículo. De este modo, también se evitan las largas caminatas por el aparcamiento buscando el coche y las entradas incómodas al habitáculo por tener otro vehículo estacionado muy cerca.

Esta revolucionaria tecnología sería compatible con los vehículos que ya circulan y que disponen de transmisión automática, Control de Estabilidad Electrónico, freno de mano electrónico y dirección asistida. Todo lo que el vehículo necesita adicionalmente es una unidad de comunicación inteligente para el aparcamiento automatizado.