Existen reinados que no deben ponerse en entredicho. El del Porsche 911 GT3 RS es uno de ellos. No lo mantiene a la fuerza, ni mucho menos. Los ingenieros de la firma de Stuttgart trabajan, generación tras generación, con un único objetivo en mente: seguir impresionando, conquistando y creando leyendas a su paso. ¿Por qué, si no es por algo así, saldría cualquiera de su trance vacacional para escribir unas líneas? Así, sin más. Por el simple placer de descubrir las novedades que estrena este Porsche 911 GT3 RS, la última obra mecánica y tecnológica de la saga 992.

La presentación mundial de este deportivo alemán merece calma y contención. ¿Cómo se puede mejorar la perfección? A base de competición. Más bien, partiendo de ella. Todo en el nuevo 911 GT3 RS bebe de la experiencia de la firma en los circuitos europeos, especialmente de los estudios sobre aerodinámica y telemetría de cronómetros. Números y más números, que dan como resultado una carrocería tan espectacular como efectiva en carretera y, por qué no… en una jornada Track Day.

El aire como aliado

Las primeras imágenes del nuevo Porsche 911 GT3 RS muestran una figura altamente adictiva, y vitaminada hasta decir basta. Los apéndices aerodinámicos, el enorme radiador derivado del 911 RSR (Le Mans) y la contundente entrada de aire del paragoples son solo lo más obvio, pero hay más.

Sin embargo, a nadie le amarga el dulce de embelesarse con la superficialidad de un capó singular por su agresividad. Lo consigue gracias al doble conducto tipo canard y las branquias laterales, sobre los pasos de rueda delanteros, que le otorgan una postura frontal muy apetecible. Justo en el fondo plano se encuentran dos alerones que modifican su ángulo de ataque en función de la velocidad y la posición de las ruedas… ¡Alucinante!

Un enamoramiento que va a más a medida que recorres su perfil lateral, que deriva tu visión hasta el alerón trasero activo de 1,80 metros de ancho. Sus dimensiones apabullantes te dejan sin respiración, ¿Está homologado para calle? Pues sí, y eso que su posición queda casi por encima de la propia altura del coche.

Pero no solo eso, ¡Tiene sistema DRS! Si eres aficionado a la Fórmula 1 ya conocerás el concepto. Para los que no, este nuevo 911 GT3 RS tiene un botón que coloca los alerones en una posición plana para una menor resistencia aerodinámica en las rectas. Además de juguetear con el aire a su antojo, los alerones del GT3 RS de la parte delantera y trasera tiene una función de aerofreno. Es decir, ante una frenada de emergencia se activan en su máximo ángulo para retener el coche como si de un caza de guerra se tratara.

Por el camino nos hemos olvidado de nombrar las llantas de 20 y 21 pulgadas respectivamente, con gomas de 275/35 R 20 delante y 335/30 R21. A través de sus radios veremos un sistema de freno de campeonato, con discos de 408 mm de diámetro con pinzas de seis pistones que han incrementado su diámetro de 31 a 32 milímetros.

En el eje trasero apuestan por la misma configuración que el GT3, a secas, con discos de freno (más gruesos) de 380 mm y frenos de pinza fija de cuatro pistones. Si con eso no es suficiente, o eres un habitual de los circuitos, puedes optar por los carbocerámicos de 410 mm en el eje delantero y 390 mm detrás.

El GT3 RS en números

Pero los datos que ponen la piel de gallina son otros, y os los vamos a dar. Desde Stuttgart aseguran que el GT3 RS dispone de 409 kg de carga aerodinámica pasados los 200 km/h y 850 kg a 285 km/h, lo que supone el doble que la generación anterior y el triple que un GT3 básico de hoy en día. Hablamos de la presión que ejerce el coche en el asfalto a esas velocidades, esencial para que no salga volando por culpa de su poderío motriz.

Un bloque conocido, el 4.0 litros de seis cilindros boxer y atmosférico, que alcanza los 525 CV de potencia gracias a algunos retoques en el árbol de levas. Todos ellos enviados al eje trasero gracias a la combinación divina del PDK de siete velocidades. Un sistema que le catapulta hasta los 296 km/h de velocidad punta y una aceleración de 0 a 100 km/h de 3,2 segundos.

No podemos terminar este artículo sin hablar de la puntilla que todo aficionado a los RS espera, su paquete Weissack. Efectivamente, el GT3 RS podrá adquirirse con ese pack que añade piezas clave en carbono: capó, techo, partes del alerón y las carcasas de los retrovisores. Un material utilizado también en las barras estabilizadoras, las bieletas del eje trasero y el panel de protección de este mismo eje.

Al interior deportivo le añadirás el pack Clubsport sin pensar (gratis) por el arco de seguridad de acero, un extintor manual y el arnés de seis puntos. Un arco 6 kilogramos más liviano en el pack Wissach. Todavía no tenemos el precio del extra, sí del nuevo Porsche 911 GT3 RS que llegará a España por 265.404 euros.