Este viernes se ha celebrado la Huelga Mundial del Clima, una protesta a nivel global convocada por el movimiento estudiantil Fridays For Future (F4F), impulsado por la joven activista Greta Thunberg. Su objetivo es exigir a los líderes mundiales que tomen medidas urgentes para acabar con la crisis climática. En España, más de un centenar de municipios de han sumado a las protestas, entre ellas Barcelona y Madrid, en dos marchas que han acumulado 20.000 personas respectivamente.

En la capital catalana la protesta se inició a las 18.00 horas en los Jardines de Gracia y culminó en la plaza de Cataluña con un parlamento, castells y conciertos. Los manifestantes, mayoritariamente jóvenes, alzaron su voz bajo las consignas No a la indiferencia, esto es una emergencia, Cambiemos el sistema, no al clima y Viva la lucha ecologista y levantaron carteles de lo más variopintos, donde se podía leer Luchamos por nuestro futuro, No hay un planeta B y Winter is not coming, mientras decenas de voluntarios, también jóvenes, estuvieron organizando y velando por el buen funcionamiento de la marcha.

Una de las adolescentes que se ha sumado a la protesta es Noa Rubio, quien a sus 14 años tiene muy claro que el planeta necesita medidas urgentes: «La tierra tiene un límite y la estamos tratando de una manera que no toca. Necesitamos acciones drásticas para evitar la contaminación« dice, y llama la atención a aquellos que no se toman en serio a sus compañeros: «Aunque seamos jóvenes sabemos pensar. Somos el futuro y sabemos que nosotros tendremos que sufrir las consecuencias del cambio climático», sentencia.

JÓVENES ADMIRABLES / Nora Roche y Alexandra Castañer son dos universitarias de 25 años a quienes les asombra la implicación de los quinceañeros: «Nos gusta ver a los estudiantes de secundaria aquí. Hace pocos años, cuando nosotras teníamos su edad, esto no pasaba» dicen. A su vez, se alegran de que la huelga vaya enfocada a pedir acciones a los dirigentes políticos, porque «nos venden que la población puede salvar el planeta reciclando, pero es mentira, porque continúan ocurriendo cosas que no están a nuestro alcance».

En Madrid tampoco se recuerda una manifestación medioambiental como la registrada este viernes en décadas, y menos por una cuestión tan poco tangible hasta ahora como el cambio climático. Unas 20.000 personas recorrieron las calles que llevan desde Atocha a la Puerta del Sol durante más de tres horas. Los adultos respondieron a la llamada a la participación de los organizadores, los estudiantes de Fridays for Future de Greta Thunberg y la marcha se llenó de padres, maestros, dirigentes ecologistas y, como no, de políticos. Los estudiantes desfilaron luciendo una profusión de pancartas y eslóganes a cada cual más ingenioso, como el Menos McDonald’s y más Amazonas».