El sector agroalimentario es una referencia de calidad e internacionalización en la provincia de Córdoba, y un importante generador de innovación tecnológica. Se trata de un ámbito en el que se mueve gente comprometida, empresas que siguen apostando por el desarrollo y la investigación, al tiempo que ganan tamaño y mercado. Además, y dentro de su papel clave en la economía cordobesa, es el sostén económico y social de muchos municipios de la provincia; que sigue enfrentándose a retos como el relevo generacional, la unión de productores y la competencia cada vez más globalizada.

Diario CÓRDOBA, en su compromiso con la provincia, en general, y con este sector estratégico, en particular, presentó ayer la segunda edición de su Anuario Agroalimentario, una publicación de 128 páginas en las que se hace un repaso exhaustivo y analítico de la situación del sector, sus retos y demandas, y sus puntos fuertes y débiles. De este modo, el anuario arranca con una presentación y los saludas institucionales, y se divide en cuatro bloques de contenidos en los que, junto a la citada presentación, se realiza una radiografía agroalimentaria de Córdoba, complementada con la opinión de los responsables de Asaja, COAG y UPA Córdoba; se continúa con un capítulo específico sobre la importancia de las cooperativas cordobesas; y se termina con una guía de productos gourmets y de las principales empresas, ampliando la que ya se incluyera en la primera edición del Anuario Agroalimentario.

Con el patrocinio del Ayuntamiento de Córdoba, la Diputación de Córdoba, Cajasur y Covap, esta publicación se entrega el próximo sábado junto al ejemplar de Diario CÓRDOBA, sin coste adicional alguno.

La importancia y el peso específico de la industria agroalimentaria en la economía tanto cordobesa como andaluza radica en su poder para generar riqueza y para crear empleo. En la provincia existe casi un millar de empresas alimentarias y algunas de sus firmas están posicionadas entre las más importantes de Andalucía. En el anuario se hace un recorrido por algunas de ellas, así como se da voz a los distintos representantes de la agricultura cordobesa, desde sus organizaciones agrarias, a cooperativas y sindicatos. Todo ello sin olvidar la importancia de la investigación e innovación, en esta edición ejemplificada en el importante proyecto Innolivar que desarrolla la Universidad de Córdoba (UCO) de la mano de empresas del sector olivarero y de la aceituna de mesa.

En la publicación se hace un repaso de los principales cultivos presentes en la provincia, con el especial protagonismo que sigue teniendo el olivar, junto a un análisis de los cítricos, el viñedo, los herbáceos y el ajo. Además, dentro de la ganadería, también se resalta la importancia del sector lácteo, así como del ganado porcino, ovino y caprino, sin olvidar la apicultura. Concluye este primer bloque con un recorrido por las denominaciones de origen, las ferias comerciales, el mercado laboral, la importancia de las exportaciones, el peso de la PAC y la actividad cinegética.

Respecto al capítulo especialmente centrado en el sector cooperativo, éste incluye un ranking de las diez principales cooperativas cordobesas; un análisis de los principales retos y problemas del cooperativismo; y un quién es quién en el sector.

Por último, un catálogo de 40 productos gourmets, símbolo de la calidad que atesora el sector; y de 32 empresas de toda la provincia completan la segunda edición de este Anuario Agroalimentario de CÓRDOBA.