La Mezquita, el Alcázar de los Reyes Cristianos, el Puente Romano, la Calleja de las Flores, los Patios y Medina Azahara forman parte de los activos que en el primer semestre del año, antes incluso de que el conjunto arqueológico recibiera el título de Patrimonio Mundial de la Unesco, sedujeron a los españoles a la hora de elegir destino vacacional, según un estudio presentado ayer por Hostelcan.

Los datos señalan que, aunque las playas de Punta Umbria o Málaga siguen ocupando mejores puestos en el ránking, Córdoba es uno de los destinos más buscados ya por encima de grandes ciudades como Barcelona, Bilbao o Palma de Mallorca. El estudio de Hostelcan señala que Córdoba no solo gana adeptos por su patrimonio monumental sino por su rica oferta gastronómica, con platos como «las berenjenas con miel, el rabo de toro, el salmorejo o los famosos flamenquines», conocidos ya en toda la geografía española.

En cualquier caso, la mayoría de viajeros españoles han decidido pasar sus vacaciones en Andalucía. De ahí que siete ciudades de esta comunidad se encuentren entre las veinte más buscadas. Punta Umbría, en Huelva es la preferida por los viajeros nacionales después de Disneyland París, que también apuntan frecuentemente hacia Roquetas de Mar en Almería, Torremolinos en Málaga, Sevilla, Málaga, Granada y Córdoba.

Junto a las playas, el turismo cultural está creciendo en la comunidad, lo que se refleja en el atractivo que representan los grandes monumentos de Córdoba, pero también la Alhambra de Granada, su Catedral, su Capilla Real o el flamenco en el Sacromonte. La zona monumental de Sevilla (Catedral, Alcázar y Archivo de Indias), también Patrimonio de la Humanidad, atrae a un número creciente de visitantes, según Hostelscan.

En cuanto a Córdoba, el presidente de la Federación Andaluza de Operadores Turísticos Hoteleros coincidió ayer en el análisis sobre el atractivo creciente de Córdoba ligado al título recién adquirido de la Unesco. «Estamos seguros de que el impacto va a ser muy bueno por el impulso publicitario que ha hecho que se ponga el foco en Córdoba desde que se declaró a Medina Azahara como Patrimonio de la Humanidad». En su opinión, «cada vez hay más turistas que se alojan en un lugar del centro de Andalucía, como puede ser Córdoba o Antequera y, desde ahí, se mueven por varias ciudades», lo que podría llevar a aumentar el número de pernoctaciones si hay más visitantes que opten por tener su punto de referencia en Córdoba. El delegado de Cultura, Francisco Alcalde, coincidió en que «este título contribuirá a desestacionalizar la oferta cultural y mejorar las pernoctaciones».