El Sindicato de Enfermería, Satse, ha denunciado que el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2018 evidencia que “el Gobierno se ha quitado la careta y ya muestra a las claras y sin tapujos que no quiere ofrecer una mejor sanidad pública a todos los ciudadanos ni mejores condiciones laborales a sus profesionales”.

Satse señala que la reducción en dos décimas del porcentaje del Producto Interior Bruto (PIB) destinado a Sanidad en la Cuentas Generales del Estado para 2018, pasando del 6 al 5,8 por ciento, "constata el nulo interés del Ejecutivo de Mariano Rajoy por mejorar el funcionamiento de nuestro sistema sanitario público, tras años de sucesivos recortes en derechos y prestaciones", informa el sindicato en una nota de prensa.

“En los últimos años el Gobierno tenía la excusa de que la reducción del gasto en Sanidad era necesario para salir de la crisis, pero ahora que presume de continuo crecimiento económico (el PIB crecerá un 2,7 por ciento en 2018) no tiene ninguna justificación. Prefiere gastarse el dinero en otra cosa y favorecer la sanidad privada en lugar de potenciar la pública”, apunta Satse.

Satse recuerda que el porcentaje del PIB destinado a gasto sanitario ha ido disminuyendo progresivamente en los últimos años desde el 6,7 por ciento en 2009 al 5,8 por ciento en 2018, lo que supone un descenso total de casi un punto. “Hablamos de miles de millones de euros menos en recursos materiales y humanos, o lo que es lo mismo, una peor atención y menor seguridad para los pacientes”, indica.

El Sindicato de Enfermería considera que el objetivo debería ser aumentar hasta el 7 por ciento, al menos, el gasto público destinado a Sanidad en nuestro país, teniendo en cuenta que la media de los países de la Unión Europea alcanzó ya el 7,2 por ciento el pasado año 2015, según los datos de la Oficina Europea de Estadística, Eurostat.

Al respecto, desde la organización sindical se subraya el hecho de que la mayoría de los países de nuestro entorno han vuelto a apostar por sus correspondientes sistemas sanitarios después de los años de crisis y han aumentado el gasto en Sanidad, "mientras que España da un nuevo paso atrás con indudables consecuencias negativas".

“Se afirma desde el Gobierno que estos presupuestos constatan el final de la austeridad y que la intención es que ningún español se quede sin notar los efectos de la recuperación económica, pero la lamentable realidad, detrás de las grandes cifras macroeconómicas, es que habrás más listas de espera, más camas en los pasillos, profesionales más saturados, menos tiempo en las consultas…”, añade Satse.

Por último, el Sindicato de Enfermería insiste en que "es absolutamente necesario seguir aumentado de forma equilibrada los recursos económicos destinados al SNS, y, de forma paralela, mejorar su eficacia y eficiencia en muchas áreas y ámbitos para generar ahorros sin menoscabar la calidad asistencial y las condiciones laborales de sus profesionales", y lamenta profundamente “el desapego del Gobierno hacia la sanidad pública con unos presupuestos precarios y cicateros que nos alejan aún mas de Europa”.