La importancia de las denominaciones de origen cordobesas sigue creciendo en los mercados nacionales y extranjeros, tanto en volumen económico como en reconocimiento por los consumidores. El Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente ha publicado esta semana su último informe sobre los productos agroalimentarios, con lo que se ha completado la serie de estudios de las distintas producciones que elabora cada año. Este trabajo, que es el más completo que se elabora sobre las denominaciones de origen, ha situado el año 2015 como el que registró las mayores ventas de las dos últimas décadas al ascender los ingresos de los siete distintivos de calidad cordobeses a 83,8 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 26,4% respecto al 2014. El vino Montilla-Moriles es el que aporta más ingresos a la provincia, con 40,49 millones de euros en la campaña 2014/2015, lo que supone un 18,4% más que en el ejercicio anterior. Pese a ello, su peso en el mercado vitivinícola aún es reducido con respecto a los grandes consejos reguladores: Cava (721,7 millones), Rioja (456,2), Ribera del Duero (364,8), Rueda (177,3) o La Mancha (156,3). Por su parte, Jerez alcanzó unas ventas de 87,6 millones. En el caso del vinagre Montilla-Moriles su importancia es escasa todavía al situarse su valor económico en 0,07 millones.

El segundo producto con mayor cuantificación es el aceite de oliva, que tiene en la denominación de Baena el distintivo más productivo de España y el que obtiene mayores ingresos de los 28 que están protegidos. Baena se convierte por primera vez en la zona española con mayores ingresos por su aceite amparado, con 26,4 millones, un 38,2% más que en el 2014, superando a la catalana Siurana (21,1) y a Estepa (17). En el caso de Priego, el valor económico de su virgen extra ascendió a 8,11 millones (+39,58%). Siguen sin terminar de arrancar las otras dos zonas cordobesas: Montoro-Adamuz (0,16 millones) y Lucena (0,05 millones).

Los jamones y paletas ibéricas de Los Pedroches mantienen su crecimiento iniciado en el año 2013. En el ejercicio del 2015 su valor económico ascendió a 8,6 millones de euros, un 31% más que en el 2014. Este importe se queda aún lejos de las denominaciones de Guijuelo (68,5 millones) y Dehesa de Extremadura (18,8), aunque está muy cerca de Jamón de Huelva (9,14).

VALORACIÓN DE LA JUNTA / El delegado provincial de Agricultura, Francisco Zurera, remarcó ayer la importancia del crecimiento, aunque piensa que hay que continuar abriendo mercados: «Hay que seguir creciendo porque éste es el camino. La sociedad va a ir reclamando, comprando y pagando los productos diferenciados en calidad».

En este sentido, Zurera destacó los valores que distinguen a este tipo de producciones: «Las denominaciones de origen son un marchamo de calidad. No todos los ciudadanos la conocen, pero campaña tras campaña el consumidor va descubriendo sus valores y escogiendo un producto de denominación, aunque tenga un valor económico extra, pero hay que valorar la gran calidad y la seguridad que hay detrás del producto».

Por eso, el representante de la Junta de Andalucía remarca que el mercado «esta valorando lo que son las denominaciones, que llevan siglos en nuestro territorio, aunque ha sido ahora cuando se han reconocido como producciones amparadas».