María José Sánchez, de 24 años de edad, es licenciada en Traducción e Interpretación desde el año 2012. Al finalizar su carrera trabajó un año como auxiliar de conversación en Malton, un pueblo de Inglaterra, becada por el Ministerio de Asuntos Exteriores, y también estudió on--line un máster en Traducción Institucional de la Universidad de Alicante. El verano pasado regresó a Córdoba y desde entonces ha realizado distintos cursos para continuar formándose y actividades de voluntariado, además de buscar trabajo. En sus circunstancias actuales, explica que "te preguntas qué has hecho mal en la carrera o qué problemas puede tener la educación para no lograr acceder al mercado laboral", y señala que "es un poco frustrante, aunque eres consciente de la situación que hay alrededor".

Este contexto ha motivado que entre los compañeros de promoción haya "mucha gente fuera ahora mismo, gente que está trabajando ya y otros que están en mi situación". De este modo, María José apunta que la mayoría de los compañeros no ha podido dedicarse en exclusiva a lo que ha estudiado "y buscan alternativas como la enseñanza".

En su caso, no ha dejado de entregar currículos para intentar acceder al mercado de trabajo, admite que se ha planteado emigrar a corto o medio plazo y tampoco descarta ocuparse en otras actividades que no sean la traducción. De este modo, señala que "me gustaría dedicarme a lo que he estudiado, pero hay que comer". En cuanto al entorno familiar, María José, que afirma que fue una buena estudiante, destaca que "mis padres me apoyan muchísimo e insisten en que intente trabajar en lo mío".