La generosidad de los propietarios de patios cordobeses quedó de nuevo en evidencia. Abrirán las puertas de sus casas una vez más, gratis (se negaron a cobrar entrada) y con las mismas ayudas que el año pasado. "Por encima de eso se ha puesto la importancia de ser la primera edición después de la declaración de la Unesco", sostuvo el alcalde de Córdoba. "Quieren que ese activo que ha reconocido la Unesco luzca este año a pesar de las dificultades que afectan a muchos propietarios de los patios".

Rafael Barón, representante de Claveles y gitanillas, dijo, después de la reunión con Nieto, que este año los patios tendrán que mostrar "una vez más" su lado más generoso, "en recuerdo de todas esos cuidadores que durante 80 años han hecho posible que hoy los que estamos podamos disfrutar de esta declaración de la Unesco".

El Ayuntamiento y las asociaciones de patios se comprometieron ayer a que esta edición sea la mejor de cuantas se han celebrado. "Tiene que ser una edición que valore el esfuerzo que durante 80 años han hecho los propietarios para lograr el reconocimiento".