El balance de la producción agrícola realizado ayer por Asaja para el año 2012 apunta a un descenso medio de las cosechas del 49%, si se tiene en cuenta las previsiones que esta organización ha realizado para la finalización de la campaña del aceite y los cítricos de este ejercicio. En este sentido, el presidente de esta organización, Ignacio Fernández de Mesa, recordó ayer que "el año 2012 ha sido un auténtico desastre climatológicamente hablando", lo que ha provocado "una sequía tremenda" con unos datos de escasez de agua que no se habían visto desde mediados del siglo pasado, por lo que en la actualidad "el clima" preocupa a la patronal "de una manera tremenda".

Los datos de Asaja indican que si en la última campaña las almazaras de la provincia batieron el récord de producción de aceite de oliva, con un 25% más que el ejercicio anterior y 322.420 toneladas, este año se espera una bajada del 54% y alrededor de 148.000 toneladas, una previsión que está siendo acompañada por una subida de los precios. De otro lado, en los cítricos la cosecha finalizada en la pasada primavera rondó las 220.000 toneladas, pero para este ejercicio también se espera un descenso del alrededor de un 20%.

Además, desde Asaja recuerdan que se han sembrado 61.000 hectáreas de trigo duro y 31.000 hectáreas de blando, de las que "se ha recogido aproximadamente una tercera parte de una cosecha normal" (sin especificar el resultado), y apuntan que de las casi 40.000 hectáreas de avena, cebada y otros herbáceos, "los rendimientos han sido similares a los del trigo", aunque en el norte de la provincia sí se han registrado "cosechas dignas de tener en cuenta". En el girasol se han cosechado unas 28.000 toneladas de pipa, por lo que se ha producido un descenso del 64% con respecto a una campaña media. En esta línea, la patronal ha explicado que la falta de cosechas de verano "ha acrecentado los problemas de liquidez de los agricultores y ha agravado la situación general de crisis".

Por otro lado, Córdoba cuenta con 780 hectáreas de uva tinta para las que hay una cosecha estimada de 5,5 millones de kilos, un 35% inferior, mientras que en el caso de la blanca de denominación de origen, a la que la provincia destina 5.600 hectáreas, la producción ha bajado un 40%, con 26 millones de kilos (afectada, sobre todo, por la sequía y los conejos). Por último, otro cultivo que mantuvo una tendencia positiva en el 2012 fue el algodón, que ha aumentado su superficie de forma leve hasta las 6.098 hectáreas y también su producción, con 17.650 toneladas frente a las 14.200 de la campaña anterior.