Si hay algo que la crisis ha dejado claro es que cuando se trata de recortar, la investigación está entre las primeras candidatas a sufrir los efectos de la tijera. Y en eso, los campus de excelencia universitarios parecen haberse llevado la palma. El ceiA3 (campus que lidera la UCO y que aglutina a cuatro universidades más) nació en el 2009 con un presupuesto original de 160 millones del que solo se consiguieron 10, que sumados a otras vías de financiación complementarias se han quedado en 24, según Justo Castaño, vicerrector de Política Científica y Campus de Excelencia.