Instituciones, cofradías, conventos y particulares se volcaron ayer en la procesión de regreso de la Virgen del Carmen hasta su sede canónica en la iglesia de San Cayetano.

Desde primeras horas de la mañana se pudieron ver numerosos balcones engalanados para el paso de la procesión, unos con colgaduras rojas y otros con la banderola oficial de la coronación, un artístico montaje donde figura la Virgen escoltada por la espadaña de San Cayetano y la torre de la Catedral.

Asimismo, destacó la colaboración de distintos grupos jóvenes de hermandades cordobesas que levantaron altares, engalanaron calles o decoraron partes del recorrido como la calle Conde de Torres Cabrera.

Mención especial merece el barrio de Santa Marina, que fue engalanado para la ocasión por vecinos y alumnos del colegio Virgen del Carmen. Los estudiantes de Primaria elaboraron unos sencillos dibujos de San Juan de la Cruz y Santa Teresa, que fueron alternándose con guirnaldas donde pendían unas sandalias en alusión a los carmelitas.