Qué ha cambiado desde la debacle de IU en las municipales del 2011 al triunfo del 25M? En 10 meses, la coalición ha conseguido recuperarse en el que fuera su feudo más simbólico, recobrar el porcentaje de votos de los 90 y colocar en el Parlamento a dos diputados, Alba Doblas y Manuel Baena. Salvando la falta de ortodoxia por entablar paralelismos entre elecciones generales, autonómicas y locales, se puede decir que de mayo a marzo, para IU este ciclo político ha sido una montaña rusa, espoleada por la crisis, la reforma laboral y los casos de corrupción, que ha resucitado un cuerpo que reposaba o casi en la antesala del forense. Ni siquiera el penúltimo incidente interno, que orilló a una candidata y provocó la dimisión del anterior coordinador, ha dañado a la coalición. IU ha logrado 56.300 votos en Córdoba, un aval que les permite hablar de triunfo sin paliativos. El coordinador provincial, Pedro García, interpreta de manera muy positiva esa recuperación frente a las municipales y cree que es una respuesta contundente de los cordobeses a "las políticas de recortes, a la pésima actuación municipal y a la reforma laboral del PP".

EL PACTO ¿Y ahora qué? Convertidos en llave de gobierno, la cabeza de lista de IU, Alba Doblas, insiste en resituar el debate: "El pacto no depende de nosotros, depende del PSOE. Entonces la pregunta es: ¿Está dispuesto el PSOE a hacer verdaderas políticas de izquierdas?". La coalición mantendrá el pulso con los socialistas con la fuerza que le han dado las urnas, porque entienden que "no es casualidad que los votos perdidos por el PSOE los hayamos ganado nosotros". Así, la clave para IU será saber si el PSOE asumirá una agenda más a la izquierda y la clave en general será saber cuánta tensión aguantará esa cuerda. En la memoria de ambas formaciones está grabada a fuego la famosa pinza del 94 y hoy día voces como la de Sánchez Gordillo se alzan ya contra el pacto. El coordinador regional Diego Valderas reclamó "humildad" y puso sobre la mesa de negociación el programa de IU, que firmó ante notario. Sus condiciones: pleno empleo, renta básica, regeneración política e institucional de Andalucía y el artículo 156 del Estatuto de Autonomía, que dice: "La economía no está al servicio de los poderosos sino del pueblo", afirma Valderas.