La antigüedad y valor de los materiales, muchos de ellos combustibles, es un problema para la seguridad de la Mezquita--Catedral. Sin embargo, ahí acaban los problemas teóricos en lo que a seguridad del edificio se refiere. El jefe de bomberos, Juan Rubio, recordaba que al tratarse de un edificio exento y rodeado de amplias calles el acceso de los bomberos y demás servicios de emergencia es óptimo. También la capacidad de desalojo del edificio, que además de las tres puertas del muro Norte, las más conocidas por los cordobeses al dar al Patio de los Naranjo, dispone de otras 6 por los otros flancos, recordó ayer el presidente del Cabildo, Manuel Pérez. De hecho, Pérez recordó una reciente ocasión en la que la Mezquita Catedral, tras una misa multitudinaria con unos 8.000 asistentes, quedó vacía en apenas diez minutos. También existe un protocolo de comunicación con la Policía Nacional en casos de altercados dentro del edificios. Además, los dispositivos de seguridad y antirrobo del edificio (de los que, lógicamente, no se dieron detalles) pasaron con nota hace dos años una inspección de expertos de la Policía Nacional, informó el presidente del Cabildo.