Los vecinos de Bujalance y Aguilar de la Frontera (Córdoba) continúan hoy limpiando el lodo de sus casas y despiertan de la tragedia tres días después de que una fuerte e inesperada tromba de agua sorprendiera a ambos municipios y se cobrara la vida de tres personas.

La teniente de alcalde de Bujalance, María José Yebras, ha explicado a Efe que los vecinos continúan hoy quitando el barro e intentando volver a la normalidad después de que el suministro de agua potable se restableciera ayer por la noche.

"Aún es pronto para evaluar las pérdidas que ha ocasionado la tormenta pero muchísimos vecinos están desbordando el Ayuntamiento para solicitar ayuda", ha indicado Yebras.

Además de las viviendas de particulares, Yebras ha informado de que algunos equipamientos públicos como el polideportivo han sido dañados "considerablemente" por lo que necesitarán máquinas para realizar los trabajos de recuperación.

Aguilar de la Frontera se encuentra en un situación muy similar que Bujalance, ya que su alcalde, Francisco Paniagua, ha indicado a Efe que los afectados siguen realizando las tareas de limpieza y más de doscientos vecinos han solicitado ya ayudas económicas.

Además, Paniagua ha informado de que los heridos que ocasionó la tormenta aún continúan ingresados en el hospital de Montilla (Córdoba), entre ellos, el hijo de la mujer que falleció tras la tromba de agua y que fue enterrada ayer junto con su sobrino en Aguilar.