El presidente del PP andaluz, Javier Arenas, dijo ayer en Málaga que espera que la fusión entre Unicaja y Cajasur "se haga una realidad" porque lo contrario sería "un rotundo fracaso político y social", y confía, por tanto, en que se cierren las bases del acuerdo laboral. El dirigente popular añadió que "hay algunas cosas que no se han hecho bien en todo este proceso". No obstante, confió en que, estando en "los momentos claves, porque son los definitivos", se cierren todos los acuerdos que procedan en los plazos previstos por el Banco de España.

Por su parte, el vicesecretario general del PSOE-A, Rafael Velasco, se mostró convencido de que se alcanzará un buen acuerdo para los trabajadores, y expresó que no es sensato que se intente "politizar", como ha hecho el PP, "alimentado" una manifestación, todo el trabajo que han hecho los empleados a través de los sindicatos y las dos entidades. Velasco animó a ambas partes a llegar a un gran acuerdo laboral que sea el punto y final para una gran fusión, por el bien de nuestra comunidad y del sistema financiero andaluz y español.

Tras precisar que se lleva trabajando mucho tiempo para llegar a buen puerto, dijo que Arenas, en vez de "sembrar tempestades", podría haber aportado un "poquito de su parte para que esto salga bien". Se preguntó, "si esto no saliera" si el "fracaso político" al que alude Arenas sería de todos o solo de una parte. "¿De quien?", le preguntó, y recordó que en los consejos de las cajas están todos los partidos con presencia parlamentaria. Volvió a preguntar si el "fracaso político sería de todos" y que si esto sale bien, "¿sólo será de una parte?". Para Velasco, "el éxito seguro que tendrá muchos padres y el fracaso estará huérfano y recaerá sobre las espaldas de uno únicamente".