Córdoba vivió ayer su tercer día consecutivo en alerta naranja con menos lluvia pero con mucho más viento. Según el observatorio meteorológico del aeropuerto, se recogieron 22,5 litros por metro cuadrado (de las 19.00 horas del martes a la misma del miércoles) y se registraron rachas de viento de hasta 75 kilómetros por hora. Precisamente, fue el viento lo que provocó ayer la mayoría de las incidencias, fundamentalmente caída de árboles y ramas, cornisas, carteles publicitarios e incluso parte del muro del colegio de los Franciscanos. En ningún caso, según informó el Servicio de Emergencias 112, hubo que lamentar daños personales, aunque sí los hubo materiales, viéndose afectados varios vehículos por la caída de ramas.

El 90% de las 26 incidencias registradas en Córdoba capital --todas ellas por los efectos del viento-- se produjeron entre las 7.00 y las 12.30 de la mañana, informó el 112. En ese periodo fue cuando las rachas fueron más fuertes, registrándose la máxima de 75 kilómetros por hora a las 9.00, según el observatorio.

En esas horas los bomberos tuvieron que redoblar esfuerzos, cumpliendo 26 salidas. Un árbol caído entre Asuán y Trassierra y otro en la avenida del Aeropuerto provocaron cortes en estas vías. También cayeron otros en la calle Las Acacias y en la carretera de Palma, además de numerosas ramas en puntos como Fátima, Lepanto o el circuito del Parque Cruz Conde. Pero el derrumbe más llamativo fue el de parte del muro del colegio de los Franciscanos, en la calle Sagunto. Los ladrillos cayeron en el acerado y sobre un banco, aunque no hubo daños personales. También hubo rotura de cristales, caída de tejas, de elementos de fachada, vallas publicitarias y antenas, entre otros puntos, en Costal Sol, avenida de Cádiz, avenida de Cervantes o en la calle Vázquez Aroca.

Al igual que los bomberos, la unidad municipal de parques y jardines se tuvo que emplear a fondo para retirar los restos de árboles y ramas, incluso para desarrollar los trabajos se vieron obligados, por ejemplo, a cerrar los Jardines de Colón, explicaron fuentes municipales.

CRITICAS DEL PP La lluvia, que mantuvo varias carreteras afectadas en la provincia por balsas de agua e inundaciones de bajos, dejó ayer menos litros en la capital y, por tanto, apenas ninguna incidencia, a diferencia de lo que ocurrió el martes. Precisamente, a raíz de las inundaciones ocurridas ese día en diversos puntos de la ciudad, el concejal del PP en el Ayuntamiento de Córdoba y consejero de Emacsa, Rafael Jaén, lamentó ayer la "demora" en la ejecución de las obras de canalizaciones que, según apuntó, "hubieran evitado en buena medida" lo ocurrido en barrios como La Fuensanta, Miralbaida, El Higuerón y Villarubia.

En respuesta a estas declaraciones, el portavoz del grupo municipal de Izquierda Unida y presidente de la Gerencia de Urbanismo, Francisco Tejada, defendió la capacidad del sistema de canalizaciones para evitar inundaciones y aseguró que los problemas fueron "puntuales y muy localizados", quedando la mayoría resueltos "en horas".

Respecto al barrio de Miralbaida, donde se anegaron pisos bajos, cocheras y el sótano de la parroquia, Tejada informó de que se han excavado dos zanjas de emergencia para evacuar el agua que desciende hacia la zona hasta los arroyos Cantarranas y Turruñuelos.