El agua volvió anoche a sobresaltar a varios municipios de la provincia, después de una larga jornada en la que tanto la Guardia Civil como los bomberos no pararon de hacer salidas. Cuatro carreteras permanecían anoche cortadas: la CO-3303, que une La Rambla con San Sebastián de los Ballesteros; la CO-3125, entre Cañete y Valenzuela; la CO-6223 en Puente Genil; y la CO-5308 en Palma del Río.
Al cierre de esta edición un paso provisional por obras sobre un arroyo en la carretera CP-213 había sido arrastrado por el agua cortando la vía que conduce a los pagos de huertas de Pedro Díaz y La Graja. Responsables de Carreteras de la Diputación, el alcalde palmeño y técnicos municipales se personaron anoche con la preocupación de que algún vecino de estas huertas se encontrase en la zona, ya que el paso por este punto no existe al arrastrar el caudal del agua el trazado provisional.
La carretera CP-213, conocida como Los Naranjales y perteneciente a la Diputación, se encuentra en obras y es la única vía para acceder a las huertas de Pedro Díaz y La Graja. Al parecer, el corte ha dejado a varias personas aisladas.
En esta zona las lluvias de las próximas horas y los próximos días serán determinantes, ya que para hoy se espera una crecida del río Genil.
En Villa del Río también tuvieron que intervenir anoche los bomberos y la Policía Local para evacuar el agua que saltaba por encima de la vía férrea al romperse un muro e inundar huertos y viviendas.
En Pozoblanco se inundaron garajes, sótanos, calles y locales. Entre estos últimos se encuentra la biblioteca pública, aunque afortunadamente los fondos bibliográficos no se han visto afectados al estar en otra altura. Los bomberos tuvieron que realizar alrededor de 21 salidas. Según los datos de la estación meteorológica de Pozoblanco, en 24 horas cayeron en el pueblo 47,8 litros por metro cuadrado. Pero fue en la mañana de ayer cuando una importante tromba dejó unos 20 litros por metro cuadrado.
RESCATE En Santaella la Guardia Civil consiguió liberar a un hombre que había quedado aislado con su vehículo ante el crecimiento de arroyos y cunetas. En Espejo los bomberos tuvieron que actuar debido al peligro que representaban varios pinos. Y en Baena se cayeron una cornisa y varios árboles. En Castro del Río también tuvieron que achicar agua los bomberos.
La Policía Local de Puente Genil tuvo que acordonar varias zonas por la caída de farolas, cornisas y de adornos navideños. El fuerte viento causó, además la caída de árboles de gran tamaño en el Pinar de San Rafael, el Parque de los Pinos y el antiguo campo de fútbol.
En Villanueva del Rey 16 viviendas se vieron afectadas al formarse una balsa de agua. Según datos oficiales fueron 90 litros por metro cuadrado en una hora los que se registraron, y los bomberos tuvieron que achicar 200.000 litros de agua. Además, se inundaron varios inmuebles y sótanos de Peñarroya- Pueblonuevo.
En Montilla, a la incesante lluvia se sumó ayer el viento, que abatió un árbol en el Paseo de las Mercedes. En la Plaza de la Rosa, el viento arrancó materiales de la fachada y tejado del edificio de la Tercia, sobre todo en la zona del Torreón del inmueble neorrenacentista que hubo de ser vallado para evitar graves riesgos a los peatones.
