--¿La crisis está produciendo impagos?

--Sí. El problema es que está sucediendo con empresarios que no podías imaginar. Cuando te entra un buen cliente y te pide financiación de la operación, que quiere poca mercancía y pagar a largo plazo, te asustas. Nosotros no vemos dinero, solo papel comercial. Todos estamos teniendo problemas de pago. Hay un problema de morosidad muy importante.

--¿Hay recortes de plantilla?

--Se está optando más por la disminución de la jornada. Se está llegando a acuerdos con los trabajadores porque están viendo lo que está pasando. Hace dos años estaban echando horas extras y ahora hay líneas de producción paradas. La gente está barriendo. Tenemos las naves más limpias que nunca y las máquinas engrasadas, algo que no se ha visto nunca. El trabajador está preocupado y cuando le haces una propuesta de reducción de la jornada cede porque conoce el panorama. Entiendo que al trabajador no le importa ahora la subida salarial, sino mantener el puesto de trabajo. Empresarios y sindicatos debemos estar en el mismo sitio.

--¿Cómo se sale de la crisis?

--Lo fundamental, a corto plazo, es la financiación.