La soga les llega al cuello. "Estamos estrangulados", asegura Javier Espinosa, presidente de los empresarios de la madera (Unemac). Espinosa atiende la entrevista mientras, en la habitación contigua, una responsable de una Administración les propone participar en una misión comercial en junio y pide un listado de empresas que puedan estar interesadas. "¿Qué le voy a decir? No sé si vamos a estar vivos en junio. Nuestra prioridad es sobrevivir a febrero, ver cómo transcurre marzo y ya veremos lo que sucede después". El presidente de Unemac no ha visto una situación como ésta en toda su trayectoria profesional. Su realidad no difiere mucho de la del resto de los empresarios de una actividad pujante hasta hace poco. Ahora, con la falta de financiación, no saben dónde recurrir para pagar la deuda, abonar los sueldos de sus empleados y llegar a final de mes. La mayoría han aplazado el pago del IVA, pero la situación no se podrá mantener mucho tiempo. "Estamos todos igual. La falta de financiación nos ha bloqueado. Las empresas que tenemos problemas para acceder a una financiación somos las mismas de hace poco, cuando nos ofrecían la financiación a espuertas", lamenta Espinosa. La patronal cordobesa estima que el 90% de las empresas están encontrando negativas de las entidades financieras para refinanciar su deuda.
Unemac se reunió ayer con el secretario general del PSOE, Juan Pablo Durán, al que le trasladó la necesidad de que el sector pueda acceder "con garantías" a las ayudas gubernamentales y le pidió que se aplace el pago del IVA, que se bonifique a las empresas que mantengan empleos o que se facilite el acceso a las ayudas del Instituto de Crédito Oficial.
Unemac también planteó hace unos días a la confederación estatal del sector que se modifique la cláusula de subida salarial y que se denuncie el convenio que, en Córdoba, se firmó en octubre. El problema, además, crece por la dependencia que tiene el sector de la construcción y la competencia desleal que genera la importación de mueble asiático, que no cumple con los requisitos de calidad y seguridad de la Unión Europea. Unemac advierte de que si no cambia pronto la situación, en tres o cuatro meses habrá cierres en cadena de empresas cordobesas al no poder hacer frente a los pagos.
