¡ Campeooones, campeooones! Como dice mi canción: "Tengo la camisa roja, porque blanca, verde y roja tengo el alma". España rompió las estadísticas desde que el 21 de junio de 1964 se proclamo campeón de la Eurocopa en el estadio Santiago Bernabéu gracias a un gol de Marcelino. Cada jugador español recibió una prima de 125.000 pesetas. Un jugador decía: "Conseguir el titulo significó para mí no hacer la mili, solo tuve que ir a jurar bandera". José Villalonga (cordobés) era el entrenador que pasó a la historia del fútbol español.
Ayer, nuestra selección española se proclamó campeona de la Eurocopa después de 44 años. Se ha producido un cambio generacional, se le ha dado un vuelco a la historia, la selección se ha doctorado, se ha hecho adulta, ha sabido competir con éxito frente a los mejores, ha dado un salto de calidad muy importante. Ha sabido matar los partidos mediante el toque y la posesión. Nos ha demostrado que jugar bien parece fácil y durante todo el campeonato demostraron que han tenido orden, equilibrio, precisión, supieron madurar y manejar los partidos y posteriormente desequilibrarlos, tuvo carácter, sentido táctico y compromiso.
Cada jugador ha sabido aceptar su rol y hasta fue un equipo con una notable estética. Han devorado la frase que orgullosos metían en sus rotativos los periódicos alemanes, en ella decían: "El fútbol son 2 veces 45 minutos y siempre ganan los alemanes". Yo les respondería con otra: "Todos hablan de movimientos sobre correr mucho, hablan de agresividad etc...". También le diría que no es necesario correr tanto. El fútbol es un juego para inteligentes, se juega con el cerebro. Debes estar en el lugar adecuado, en el momento justo, ni demasiado pronto ni demasiado tarde.
Esta interpretación es la que dio España ayer a un partido en la que supo contrarrestar, combatir y superar a una montaña grande de músculo, y con poco riego sanguíneo en el cerebro (los alemanes). Alemania quiso pero no pudo con España, entre otras cosas porque su propuesta fue vana. No quiso jugar al fútbol. Tengo un amigo que un día me dijo: "Tengo dos problemas para jugar al fútbol. Uno es la pierna izquierda. El otro, la pierna derecha".
Este cambio generacional (Luis Aragonés tiene un porcentaje elevado de culpa). También en las categorías inferiores llevan años trabajando muy bien. Esta propuesta que nos ha invitado la selección, este estilo de juego y los argumentos que ha expuesto durante todo el Europeo y esa autoridad con la que se han proclamado campeones no es fácil de asimilar a corto plazo, ni fácil de conseguir.
Como cordobés y español, mi más sincera felicitación a un equipo que ha hecho historia. Un día preguntó un niño a uno de los jugadores más inteligentes del mundo: "¿Cómo es que haces que todo parezca tan fácil?" El jugador contestó: "Me paro donde no hay nadie y se la suelo dar al que está solo". Aquel día nuestra selección tomó buena nota.
