Tras 14 años cerrado al público y con un largo rosario de obras y paralizaciones, el teatro de la Axerquía se abrió ayer a la sociedad. El espacio se utilizó anoche para uno de los acontecimientos a los que siempre estuvo unido, el Festival de la Guitarra. Fue Izquierda Unida quien retomó la idea de sacar al teatro del olvido, tras la paralización que sufrió en el mandato popular de Rafael Merino.

La inversión municipal ha sido de seis millones de euros desde que se iniciaron las obras entre 1991 y 1995 y se retomaron en el 2002 hasta hoy. De las labores más recientes, la primera fase se inició en febrero del 2004 y consistió en demoliciones de estructuras. Entre julio del 2006 y la actualidad, pues aún faltan pequeños retoques, se ha desarrollado una segunda etapa, con la supresión de elementos que tenían un fuerte impacto visual, ha remodelado graderíos y los accesos.

La tercera fase, cuyo proyecto debe redactarse, establece la terminación del pequeño teatro cubierto que existe tras el gran escenario y que servirá para los ensayos generales de la Orquesta y los conciertos didácticos.