LLa primavera está al llegar y con ella los meses peores para los alérgicos al polen del olivo y al de gramíneas, que son los más extendidos en Córdoba. Sin embargo, la calidad de vida de los alérgicos al polen del olivo en Córdoba está mejorando gracias a que un número importante de ellos está recibiendo la nueva inmunización a medida que comenzó a implantarse en el hospital Reina Sofía a finales del 2005, vacuna adaptada a las características de los enfermos de Córdoba y Jaén, las provincias con más olivos. A los alérgicos se les realiza en el hospital un análisis de sangre para saber qué proteínas del polen del olivo debe contener la vacuna y de este modo reciben una inmunización aún más específica que la anterior.

La alergóloga del hospital Reina Sofía, Carmen Moreno, explica que en los últimos 10 años "hemos tratado en la Unidad de Inmunoterapia a unos 12.000 pacientes, de los que más de la mitad son alérgicos al polen del olivo". Por eso, "a esta altura tenemos mucha experiencia y estamos en condiciones de ofrecer una vacuna muy a la medida y que se tolera mucho mejor, según la edad del paciente, la antigüedad de la enfermedad, o si vive en el campo o la ciudad".

Moreno expone que "hay un dato que nos ha permitido comprobar los mayores beneficios del nuevo tratamiento contra el polen del olivo frente al anterior. La primavera del año pasado fue muy dura porque las concentraciones de polen fueron muy elevadas y la polinización se produjo en muy poco tiempo". Sin embargo, esta experta añade que gracias a la nueva vacuna los alérgicos necesitaron consumir la pasada primavera menos medicación paliativa, visitaron las Urgencias en menos ocasiones, los asmáticos tuvieron menos despertares nocturnos, se registraron menos jornadas de clase y de trabajo perdidas y los pacientes no tuvieron que renunciar a salir al aire libre o a ir a la feria.

Según esta alergóloga, la nueva vacuna del olivo se tolera mucho mejor, de forma que las reacciones adversas a la misma se sitúan en poco más del 2%, frente al 10% de la anterior. Otro aspecto importante que hay que tener en cuenta es la cantidad de polen que inhalan los alérgicos y el tiempo que llevan haciéndolo. "Los pacientes de Córdoba y Jaén están tan acostumbrados a convivir con grandes concentraciones de polen de olivo que solo por encima de unas cantidades abusivas es cuando enferman, pero en estas condiciones son los que más sufren".