El sargento primero Antonio Jurado, mecánico de automoción y jefe del taller de vehículos ligeros, sigue, lo mismo que "la gran mayoría de los compañeros, las andaduras de nuestro glorioso y gran club de fútbol", el Córdoba " , "y también sabemos de nuestra tierra".

Dice que el 24 de diciembre "trabajamos hasta el mediodía los que no teníamos servicio; el resto nos ocupamos de una gran cena, más que copiosa; fue la de una gran familia". Luego hubo fiesta hasta la madrugada y supone que hoy será igual. "El horario de servicio es el mismo, hay que seguir cumpliendo con nuestra misión".

Su mujer, Justi, habla con él por teléfono los sábados, "y los miércoles nos vemos en videoconferencia por internet". De esta forma, la separación "se hace más llevadera", a lo que contribuyó que "vino de permiso una semana en octubre". De los dos hijos de este matrimonio, "el niño, de tres años, le echa mucho de menos; tiene locura con su padre. La más chica, de 15 meses, todavía se da poca cuenta". Esta noche la pasará en casa de sus padres.

Estos tres soldados cordobeses no tenían ayer conocimiento de los preparativos para la despedida del año. "No tenemos constancia del menú, pero creemos que habrá una pequeña gran fiesta en la que celebraremos la llegada del 2006".

David, Miguel y Antonio forman parte del contingente de 552 soldados de la Brigada de Infantería Guzmán el Bueno X que inició su marcha a Kosovo en agosto. La población de esa zona está compuesta de minorías étnicas: cerca de 40.000 albaneses, 2.500 gitanos, 1.500 bosnios y poco más de 500 serbios. Además de las labores humanitarias y de seguridad, la agrupación se encarga de proteger los lugares de interés patrimonial, como iglesias y monasterios, así como de controlar los límites administrativos de Serbia y Montenegro.

Esta noche no cenarán con sus familiares, lo harán en la base España junto a sus compañeros, su otra familia, como coinciden en denominarla.

Acostumbrados como están a acudir a internet, si consultan la página diariocordoba.com podrán ver ese menú que desconocen, y que nos ha facilitado la mujer de otro militar: entremeses, cóctel de mariscos y cordero de plato fuerte. Más típico, imposible. Luego habrá fiesta hasta las dos de la madrugada en el salón multiusos. Y el día 1 seguirán con la misión.