Quienes nacimos en la década de los cuarenta o cincuenta, en la actualidad estamos asistiendo a algo que si nos lo hubieran dicho entonces, no lo hubiésemos creído, por ejemplo:

Cómo íbamos a pensar que la moda sería llevar unos pantalones con parches y girones; llevar un moño era un signo de elegancia en las señoras, pues bien, hoy es el hombre el que presume de llevarlo, incluidos aretes o pendientes en los lóbulos de sus orejas; llevar tatuajes era cosa que solo llevaban los legionarios y personajes poco fiables, hoy raros son los jóvenes que no llevan su cuerpo tatuado; ahora quien estuvo secuestrado 532 días en un zulo de 3m. de largo y 2,5 m de ancho, con solo una manta de abrigo, lo denominan como extremista y quien perteneció a la familia etarra, ejecutores del secuestro es considerado como un hombre de paz. Debes tener cuidado con piropear a una mujer, te pude costar caro, pero carece de importancia desear la muerte al Jefe del Estado y a su familia. En resumen nos quieren hacer ver lo blanco, negro; lo chabacano, elegante y que los malos son los buenos.