Confundiendo un periódico de información general con una exigente revista especializada, Manuel Pedregosa, crítico musical de este diario, ha arremetido de forma inmisericorde con el joven chelista murciano Pedro Fernández Millán, que el jueves nos deleitó, junto a la Orquesta de Córdoba, con el Concierto para violonchelo y orquesta en do mayor de Haydn. Repito, nos deleitó, como corroboró la larga ovación que le dedicó un Gran Teatro lleno. Me entristece que a una joven promesa de 19 años se la castigue con semejante «jarro de agua fría», que espero no haga mella en su ánimo ni en su ilusionada carrera musical. De las ochenta palabras que el señor Pedregosa se digna dedicarle, no hay una sola de aliento, estímulo o comprensión que merece un joven y ya destacado talento musical, cuyas dotes interpretativas pone incluso en duda. No es justo.