Israel abre una "ruta temporal" para forzar la evacuación de Ciudad de Gaza ante su ofensiva para tomarla

Centenares de vehículos llevan días alineados en una carretera que bordea el mar Mediterráneo. Avanzan con lentitud. Las miles de personas que recorren a pie el mismo trayecto no van mucho más rápido. La escasez de alimentos durante meses y un cansancio ya crónico han debilitado sus piernas. Es la única ruta de huida desde Ciudad de Gaza, donde el Ejército israelí ha lanzado una operación militar a gran escala para hacerse con ella. Escapar no es garantía de salvar la vida, aunque ahora parece que, tras las críticas internacionales y locales a la ofensiva, las tropas israelíes buscan dar más seguridad a los civiles con el anuncio de una "ruta temporal" para el desplazamiento forzoso de los gazatíes durante 48 horas. Sin embargo, la huída sigue teniendo lugar bajo fuertes bombardeos, ataques aéreos, artillería pesada y una invasión terrestre.

"Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anuncian que, para facilitar el movimiento hacia el sur, se está abriendo una ruta de transferencia temporal a través de la calle Saladino", ha anunciado en su cuenta de X el portavoz en árabe de las fuerzas israelíes, Avichay Adraee. En un mensaje escrito en árabe, acompañado de un mapa con varias líneas marcadas en amarillo, Adraeee ha dicho que las rutas estarán disponibles desde este miércoles a las 12.00, hora local (11.00, hora española), hasta la misma hora del viernes. "Sólo circulen por las calles marcadas en amarillo en el mapa como ruta en dirección al sur, obedezcan las instrucciones de las fuerzas de seguridad", ha añadido.

Desde principios de agosto, miles de palestinos han abandonado Ciudad de Gaza. Fue entonces cuando el Gobierno del primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, anunció que el Ejército lanzaría una operación militar para ocupar la principal urbe de los territorios palestinos. En la capital del enclave, había un millón de personas. Durante estas cinco semanas, al menos 350.000, según las autoridades militares israelíes, han huido de la ciudad en busca de un lugar seguro, algo que ya no existe en toda la Franja. En el pasado, Israel ya había utilizado esta ruta por la calle Saladino como un supuesto corredor humanitario, no exento de sufrir ataques.

Miles de gazatíes tratan de huir hacia el sur

A parte de los bombardeos y el éxodo forzado, los palestinos de Ciudad de Gaza también se enfrentan al silencio. La Autoridad Reguladora de Telecomunicaciones Palestina, con sede en la Cisjordania ocupada, ha anunciado que los ataques israelíes a las principales líneas de red en el norte de Gaza han colapsado los servicios de internet y teléfono, aislando a los habitantes de Gaza del mundo exterior. Según el Ejército israelí, sus unidades de artillería y su fuerza aérea han atacado la ciudad más de 150 veces en los últimos días, antes del avance de las tropas terrestres, que incluirían a unos 20.000 reclutas. Estos bombardeos han derribado torres de gran altura en áreas densamente pobladas con campamentos de tiendas donde se refugian miles de palestinos.

Sin internet

La incomunicación del norte de Gaza va más allá del apagón. Israel controla todos los accesos al enclave, y Naciones Unidas ha advertido que no habrá suministros por el cierre del cruce de Zikim por parte de las autoridades israelíes el pasado día 12. "Existe una grave preocupación por el agotamiento de las reservas de combustible y alimentos en cuestión de días, ya que ahora no hay puntos de entrada directa de ayuda al norte de Gaza y el reabastecimiento de sur a norte es cada vez más difícil debido a la creciente congestión vial y la inseguridad", ha afirmado la oficina humanitaria de la ONU, OCHA por sus siglas en inglés, en un comunicado. Aparte, el Ministerio de Salud de Gaza ha acusado a las fuerzas israelíes de frustrar “deliberadamente” los intentos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de llevar combustible a los hospitales en el territorio asediado.

La Organización de Defensa Civil de Gaza ha denunciado que 70.000 personas han perdido sus hogares desde el inicio de la ofensiva para ocupar Ciudad de Gaza. El Ministerio de Información gazatí afirma que el número de desplazados de la urbe se sitúa alrededor de las 190.000 personas. Además, señala que unas 800.000 personas residen actualmente en la zona de Al Mawasi, al sur del enclave y donde el Ejército israelí ha indicado a los gazatíes que se dirijan. "Israel está intentando hacinar a más de 1,7 millones de personas en esta zona, que carece de la infraestructura básica necesaria para sobrevivir: hospitales, agua, alimentos, refugio, electricidad o educación", ha denunciado el ministerio.

Al menos 62 palestinos han muerto por ataques israelíes desde esta madrugada en todo el enclave. Un niño y su madre están entre los muertos en un ataque a un apartamento residencial en la calle Eidya en el campamento de refugiados de Shati, al oeste de Ciudad de Gaza, donde ha habido 24 víctimas mortales. A su vez, el Ejército israelí ha destruido al menos 17 edificios residenciales en esta misma urbe, de la que alegan ya controlar más del 50%. A las puertas del hospital al Shifa, el mayor en toda la Franja, situado al oeste de Ciudad de Gaza, un ataque israelí ha matado a 13 personas. Sólo durante este martes, al menos 101 personas fallecieron en toda la Franja de Gaza. La mayoría, unas 86, perdieron la vida en Ciudad de Gaza. Durante estos casi dos años de ofensiva, Israel ha matado a 65.062 palestinos, herido a 165.697 y 432 personas han muerto de hambre en Gaza.

Gaza, una "bonanza inmobiliaria"

La situación es de tal gravedad que una veintena de grupos de ayuda han exigido a los gobiernos que intervengan de forma urgente en la actual ocupación israelí de Ciudad de Gaza. "Los Estados deben utilizar todas las herramientas políticas, económicas y legales a su alcance para intervenir; la retórica y las medidas a medias no bastan, este momento exige una acción decisiva", han dicho en un comunicado organizaciones como Save the Children, Oxfam, y Médicos Sin Fronteras. "Nos encontramos al borde de un período aún más mortífero: Gaza se ha vuelto deliberadamente inhabitable", han alertado, citando la desesperación de algunas familias gazatíes "que se alimentan de animales para sobrevivir y hierven hojas para alimentar a sus hijos".

Mientras, a decenas de kilómetros de Gaza, los ministros israelíes fantasean con su futuro. Bezalel Smotrich, el colono radical que ocupa la cartera de Finanzas, afirma que la Franja es una "bonanza inmobiliaria" y que está en conversaciones con los estadounidenses sobre cómo dividir el enclave costero después de la guerra. "Hemos invertido mucho dinero en esta guerra, tenemos que ver cómo dividimos el terreno en porcentajes", ha dicho en una conferencia inmobiliaria en Tel Aviv. "La demolición, la primera etapa de la renovación de la ciudad, ya la hemos realizado; ahora solo falta construir", ha añadido. Hace meses que el presidente estadounidense Donald Trump habla de convertir la Franja en una "Riviera" controlada por Washington, obligando a gran parte de la población palestina a abandonar el enclave.

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