Reunión en Ramstein

EEUU alerta de que la supervivencia de Ucrania está "en peligro"

Kallas, la primera ministra de Estonia a quien Putin ha puesto en su 'lista negra', apremia a aumentar a un 3% el gasto en Defensa

El secretario de Defensa de EEUU, Lloyd Austin, en Ramstein (Alemania).

El secretario de Defensa de EEUU, Lloyd Austin, en Ramstein (Alemania). / EFE

Gemma Casadevall

Estados Unidos ve "en peligro" la supervivencia de Ucrania, advirtió este martes el secretario de Defensa, Lloyd Austin, tras un encuentro con una cincuentena de aliados de Kiev; es decir, toda la OTAN más otros países asociados. Fue en el llamado Grupo de Contacto para la Defensa de Ucrania, que se reunió de nuevo en la base aérea estadounidense de Ramstein, en el sur de Alemania. El telón de fondo, esta vez, es una Europa cada más inquieta y apuntando a su propio rearme, mientras la mayoría republicana de la Cámara de Representantes de Washington sigue bloqueando los 60.000 millones de dólares adicionales destinados a Ucrania.

"(Vladímir) Putin no se detendrá en Ucrania, pero tal como ha dicho el presidente (Joe) Biden, Ucrania puede detener a Putin si les proporcionamos las armas que precisa", aseguró el jefe del Pentágono. Esta fue la frase de saludo de Austin en la apertura de las sesiones de Ramstein. En la cita, según había anunciado el viernes el canciller alemán, Olaf Scholz, debían concretarse nuevos acuerdos entre los titulares de Defensa presentes. El anuncio del líder alemán tuvo lugar tras su encuentro con el presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro polaco, Donald Tusk, en Berlín. Scholz llegó a apuntar a una "coalición de misiles" -en la que no entrarían los de largo alcance Taurus, cuyo envío rechaza el canciller- y a emplear activos incautados a Rusia para la compra de armas destinadas a Ucrania. Esto último al menos sí ha empezado a tomar cuerpo, aunque a escala europea. El alto representante de Política Exterior europea, Josep Borrell, presentará formalmente la correspondiente iniciativa para añadir a los presupuestos del bloque comunitario los 3.000 millones de euros anuales que generan esos activos rusos congelados. Su destino será el apoyo militar a Ucrania.

También se ha materializado otra coalición de 14 países, encabezada por Finlandia y con Alemania, Dinamarca, Polonia y los estados bálticos entre ellos, que ha pedido al Banco Europeo de Inversiones (BEI) que incremente el apoyo a la industria europea de Defensa. El contexto es la necesidad de aumentar la producción destinada a Ucrania, así como la del propio bloque comunitario. Especialmente entre los países fronterizos con Rusia Bielorrusia --como Finlandia y Suecia, recién incorporada a la OTAN, o los bálticos Estonia, Lituania y Letonia-- se suceden advertencias similares a la de Austin sobre la presunta voluntad de Putin de ir "más allá" de Ucrania.

El 2% del PIB no basta

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, señalaba hace unas semanas como un éxito el hecho de que este año, por primera vez, 18 países miembros de la Alianza --del total de 32, tras consumarse el ingreso de Suecia-- cumplirán este 2024 con el objetivo de destinar un 2 % de su producto interior bruto (PIB) a defensa. Entre ellos, por primera vez, estará Alemania.

Este objetivo, acordado en la cumbre de Gales de 2014, se ha quedado sin embargo corto, según la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas. "Estonia destina ya un 3,2% de su PIB a Defensa. La totalidad de los aliados deberían hacer un esfuerzo y situarse sobre el 3%", apremió la líder báltica, invitada en un foro europeo celebrado en Berlín, junto con Scholz.

Kallas fue recibida en la capital alemana como el rostro del coraje frente a Putin. El líder del Kremlin la colocó en su lista negra, por considerarla responsable política del desmantelamiento de los monumentos soviéticos en Estonia, país donde un 25 % de la población tiene raíces rusas. Kallas ha afirmado reiteradamente que no se dejará amilanar por esa amenaza y que estar en esa lista es un honor.

La alusión al 3% tiene cierta relevancia, ya que se le atribuyen aspiraciones a convertirse en la sucesora de Stoltenberg al frente de la OTAN. Sería la tercera opción, junto al primer ministro neerlandés, Mark Rutte, y el presidente rumano, Klaus Iohannis. A Rutte se le consideraba predestinado a suceder a Stoltenberg, pero ha topado con el veto del líder ultranacionalista húngaro, Viktor Orbán. Iohannis es un candidato de escaso peso a escala europea. En contra de Kallas está que representa la máxima confrontación con Putin, lo que podría exacerbar aún más los ánimos del Kremlin contra las exrepúblicas soviéticas bálticas, miembros de la OTAN desde hace 20 años.

Siguiente paquete alemán: 500 millones y munición

Alemania, segundo contribuyente al apoyo a Ucrania tras Estados Unidos, anunció en Ramstein un nuevo paquete de ayuda por valor de 500 millones de euros. La decisión de Scholz de no entregar sus Taurus ha colocado al canciller bajo fuertes tensiones, también dentro de su coalición de gobierno entre socialdemócratas, verdes y liberales. Al menos, su ministro de Defensa, Boris Pistorius, anunció desde la base estadounidense esa nueva partida, que se plasmará en unos 200 blindados, más 10.000 rondas de munición. "Mantendremos nuestro apoyo ahí donde más se necesita, lo que va de los sistemas de defensa antiaérea a la munición", garantizó Pistorius.