Guerra en Ucrania

La UE da los primeros para formar pilotos ucranianos de aviones de combate

“El entrenamiento de pilotos ha empezado y espero que pronto podamos proveer a Ucrania con este tipo de armas”, ha celebrado el alto representante para la política exterior de la UE, Josep Borrell

Un caza ruso.

Un caza ruso. / EP

Silvia Martínez

Una de las primeras carencias que los gobiernos de la Unión Europea colmaron en Ucrania tras la invasión de Rusiahace poco más de un año fue el envío de munición y armas. Tras meses de tira y afloja los Veintisiete se comprometieron a enviar carros de combate, incluidos los tanques alemanes Leopard2 y formar soldados en su manejo y, finalmente, parece que se acerca la hora de enviar los aviones de combate que el Gobierno de Volodimir Zelenski reclama desde hace meses. Varios Estados miembros se han comprometido a empezar formar a pilotos en el uso de cazas F-16. “El entrenamiento de pilotos ha empezado y espero que pronto podamos proveer a Ucrania con este tipo de armas”, ha celebrado el alto representante para la política exterior de la UE, Josep Borrell, en el marco del consejo de ministros de exteriores celebrado en Bruselas.

El jefe de la diplomacia europea ha calificado de “bueno” el que los países del G7 decidieran durante la reunión celebrada este fin de semana en Hiroshima (Japón) “preparar el terreno para proporcionar a Ucrania los aviones de combate que necesita” aunque el asunto no se ha debatido durante la reunión de ministros de exteriores de la UE. “No ha habido un debate específico sobre cazas pero tampoco sobre armamento. Ha habido un debate más centrado en las sanciones, en la lucha contra la impunidad, en avanzar en el tribunal que debe juzgar los crímenes (de Rusia) y lo que sí ha habido es un llamamiento a la necesidad de suministrar la munición que se necesita para la defensa de Ucrania”, ha explicado tras el encuentro el jefe de la diplomacia española, José Manuel Albares.

El envío de cazas es una antigua demanda de Kiev a la que muy pocos países se han mostrado receptivos hasta ahora para evitar una escalada y aumentar las tensiones con Moscú. Aún así, países como Polonia y Eslovaquia se convirtieron hace unas semanas en los primeros en suministrar este tipo de medios aunque enviaron cazas MiG 29, de fabricación soviética, mucho menos modernos que los F16 reclamados por Kiev e insuficientes, según sostienen, para garantizar la seguridad en sus cielos. La situación en unos meses parece hacer dado un giro de 180 grados.

“Nadie dice que es imposible. Si comparamos con la situación que había hace tres meses, cuando todavía estábamos tratando de obtener tanques, hoy todos hablan de una coalición de combatientes, esta es una señal muy prometedora. Entendemos que nuestra defensa aérea no estará completa sin los cazas F-16”, advertía hace unos días en el diaro Político el asesor del ministro ucraniano de defensa Yuriy Sak que estima entre 40 y 50 las unidades que es gustaría obtener de un modelo de avión utilizado por más de media docena de países europeos entre los que figuran Holanda, Bélgica, Portugal, Polonia, Holanda y Noruega. 

Compromisos en el G7

Durante la cumbre del G7, y tras una gira de Zelenski por varios países el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció que su país, que opera una de las flotas más importantes, ayudará a formar pilotos ucranianos en el manejo de este tipo de aparatos. Se trata de una decisión que secundan también varios países de la OTAN tal y como avanzaron en Reykiavik los mandatarios de Reino Unido, Holanda, Bélgica y Francia. “Francia está dispuesta, con otros socios europeos, y otros países a participar en la formación de pilotos ucranianos”, ha confirmado este lunes la ministra Catherine Colonna. La puesta en marcha de la decisión, no obstante, “llevará varios meses” por lo que ha abogado por avanzar paso a paso. “En la actualidad, las necesidades de Ucrania son esencialmente municiones, vehículos blindados, vehículos blindados avanzados, tanques y también (servicios) de mantenimiento”, ha recordado.

Con prudencia se ha pronunciado también el ministro holandés, Wopke Hoekstra. “La decisión que hemos tomado ahora es asegurarnos de que entrenamos a los pilotos (ucranianos) para que, si decidimos enviar aviones de combate (a Ucrania), estén preparados. Pero esa es una decisión aparte que no vamos a debatir hoy”, ha explicado sobre el envío de cazas. “Para Países Bajos no hay tabúes (cuando se trata de suministrar cazas F-16 a Ucrania)”, ha añadido sin dar detalles sobre el posible envío y centrándose en el entrenamiento. “Nuestra intención es asegurarnos de que lo hacemos cuanto antes, pero no voy a mencionar un número de días o semanas o meses, porque no creo que sea útil”, ha añadido. Países como Alemania, que no disponen de F-16, ya han descartado sumarse a la coalición y lo mismo Portugal que aunque no se plantea enviar cazas sí está abierto a formar pilotos.

La situación en Ucrania, en todo caso, ha vuelto a centrar buena parte de la reunión de los Veintisiete que siguen sin cerrar un acuerdo ni sobre el undécimo paquete de sanciones, centrado en evitar la elusión de sanciones por parte de terceros países y que los embajadores permanentes continuarán negociando el miércoles, ni sobre un nuevo tramo de 500 millones de euros del Fondo Europeo de Apoyo a la Paz que Hungría mantiene bloqueado mientras Kiev mantenga en la lista de patrocinadores internacionales de la guerra al mayor país del país, el OTP.