Guerra de Ucrania

Borrell reconoce que la UE no ha cumplido con los objetivos de munición para Ucrania

El jefe de la diplomacia europea espera que los Veintisiete logren un "acuerdo total" sobre el plan de compras conjuntas en los próximos días

El jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, este lunes.

El jefe de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, este lunes. / CONSEJO DE LA UE

Silvia Martínez

La entrega de munición de la Unión Europea a Ucrania no avanza al ritmo deseado ni por el ministro de exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, ni por el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, que ha admitido que los gobiernos europeos están entregando con mayor lentitud de lo esperado y que entiende los llamamientos de urgencia de su homólogo ucraniano. "El ministro Kuleba ha planteado sus demandas con la angustia que siente el que vive una guerra. Podemos teorizar pero Ucrania está siendo bombardeada sistemáticamente y es normal que pida con insistencia y urgencia más y más ayuda", ha asegurado tras una larga reunión de ministros de Exteriores en Luxemburgo en la que ha comparecido por videoconferencia.

Kuleba ha trasladado a los 27 las prioridades y necesidades de Kiev y sobre todo ha pedido el envío "lo antes posible" de más vehículos armados, tanques, sistemas de artillería y munición así como la formación de pilotos en aviones de combate F-16. "Sabemos que Ucrania necesita misiles y munición urgentemente para defender su territorio. No es que Rusia no quiera dejar las hostilidades y Ucrania tampoco. Es que Rusia no quiere parar, detener la invasión y Ucrania no tiene más remedio que seguir defendiéndose", ha reconocido Borrell admitiendo que las entregas no van tan rápido como le gustaría. 

"Créanme que hacemos todo lo que podemos para cumplir con nuestros compromisos. No puedo concretar una cifra, porque cambia todos los días, pero es cierto que el primer ‘track’, que consiste en entregar parte de los ‘stock’ militares de los Estados miembros se ha concentrado fundamentalmente en los misiles pero la munición tiene unas cifras que no alcanzan las perspectivas que me gustaría a mi y le gustaría a Kuleba", ha explicado", cifrando en un millar los misiles entregados hasta ahora a Kiev.

A juicio de Borrell, lo que deben hacer ahora los 27, cuando Moscú se prepara para una posible ofensiva esta primavera, es "forzar el ritmo y aumentar las entregas", algo que trasladará también a los ministros de defensa de la UE. "Todos los ministros comprenden la urgencia de la demanda de Ucrania y me voy a dirigir a los ministros de defensa de los Estados miembros para transmitir la demanda de acelerar las entregas porque la única manera de contrarrestar los ataques rusos es una capacidad que depende de nuestra ayuda", ha explicado tras un encuentro marcado no solo por los retrasos en la entrega de munición de la reservas militares sino por la falta de consenso entorno a un texto legal que permita activar el plan de compras conjuntas de munición acordado el pasado 20 de marzo.

Plan de compras conjuntas

"Todavía hay algunos desacuerdos pero estoy seguro de que todo el mundo entenderá que nos encontramos en una situación de extrema urgencia", valoraba a su llegada a la reunión sin entrar a valorar las exigencias de países como Francia, partidario de que los encargos de nuevo armamento se realicen solo a la industria europea para enfado de países como Polonia, Holanda, Alemania o los bálticos que consideran que lo más importancia es actuar con rapidez. "Estoy seguro que en los próximos días los Estados miembros llegarán a un acuerdo total sobre cómo hacer esa demanda adicional a la industria por valor de 1.000 millones", ha añadido en la rueda de prensa posterior sobre la segunda medida del plan aprobado por los Veintisiete. 

La primera es el envío inmediato de más munición de las reservas de los Veintisiete para lo cual la UE dedicará 1.000 millones de euros. Hasta ahora, según ha explicado, los gobiernos han han solicitado el reembolso de 600 millones de euros lo que significa que todavía tienen margen para reembolsar más contribuciones. Borrell también se ha referido a los llamamientos a la paz desde China o Brasil. "Para que sean creíbles y honestos es necesario hablar con Kiev y visitar Kiev, ver la agresión a través de los ojos de quienes están recibiendo bombas", ha recomendado el político español que ha recordado que la situación es que hay un país "agresor" que ha violado la carta de Naciones Unidas e invadido un país y otro que es una víctima. "No podemos aceptar el enfoque benevolente porque no se puede poner en pie de igualdad al agresor y al agredido", ha añadido abogando por hablar con países terceros de Latinoamérica, África y Asia para contrarrestar la narrativa rusa y luchar contra la elusión de sanciones.