Seguridad Vial

Bruselas propone rebajar a los 17 años la edad para conducir coches y camiones

La Comisión Europea plantea crear un permiso digital válido para los Veintisiete | También sugiere que la retirada del carnet por infracción grave se aplique en toda la UE

La Unión Europea quiere imponer un carnet de conducir conjunto para todos sus países miembros

Agencia ATLAS

Silvia Martínez

El 40% de las infracciones de tráfico transfronterizas cometidas en 2019 en la Unión Europea quedaron impunes bien porque no se identificó al infractor o bien porque no se ejecutó el pago. La Comisión Europea quiere terminar con esta impunidad al volante y garantizar que aquellos que cometan infracciones graves en las carreteras de otros Estados miembros paguen por el delito, incluida la retirada del permiso de conducir, de forma que la decisión sea efectiva en toda la Unión Europea.

Esta es una de las principales novedades del plan lanzado este miércoles por el Ejecutivo comunitario para modernizar y mejorar las normas europeas sobre seguridad vial. “Esperamos que la gente sea consciente de que será más fácil que el propietario del vehículo sea identificado y pueda responder. Manda un mensaje y esperamos que este mensaje permita reducir las infracciones en el extranjero”, ha explicado la comisaria de transportes, Adina Valean.

Según el marco jurídico actual, incluso cuando la conducta de un conductor es extremadamente grave y debería dar lugar a la retirada del permiso de conducir, este solo puede retirarse si la infracción se cometió en el Estado miembro que expidió el permiso de conducción. Para hacer frente a esta laguna en la legislación, Bruselas plantea que los países de la UE puedan solicitar la retirada del carnet al país emisor en el caso de las infracciones más graves. Esto es, exceso de velocidadconducción en estado de embriaguez o bajo los efectos de las drogas y cualquier infracción grave que termine con resultado de muerte o lesiones corporales graves.

La propuesta, que ahora deberá ser negociada entre los gobiernos europeos y el Parlamento Europeo, plantea permitir a las autoridades de tráfico acceder a los registros nacionales de permisos de conducir del Estado miembro emisor con el objetivo de facilitar la identificación de los infractores. También propone ampliar las responsabilidades y competencias de los puntos de contacto nacionales establecidos para garantizar que cooperen sin fisuras con las autoridades de control implicadas en la investigación de las infracciones. Y especificar los datos que deben intercambiarse -y mantener actualizados- para que la caza del infractor sea más efectiva. Aunque la proporción de infracciones detectadas con vehículos matriculados en el extranjero difiere significativamente entre los Estados miembros, por término medio alrededor del 18% de todas las infracciones por exceso de velocidad son cometidas por conductores no residentes.

Según los datos que maneja la Comisión Europea en 2019 se cometieron 14,5 millones de delitos de tráfico con un vehículo registrado en el extranjero y por un conductor que no fue identificado en el momento. Aunque 8,2 millones de multas terminaron pagándose, el grueso de forma voluntaria, unos 6,3 millones quedaron impunes. Se trata de una cifra que en Bruselas consideran relativamente elevada si se compara con el nivel general de impunidad de infracciones comparables en los Estados miembros (en su mayoría, excesos de velocidad detectados por radares fijos) y que oscila entre el 5% en los países con mejores resultados (Países Bajos, Suecia, Polonia) y el 10-20% de media (Luxemburgo, Letonia, Irlanda, España, Estonia, Hungría).

Carnet desde los 17 años

El plan, que aspira a reducir a cero el número de fallecidos en las carreteras europeas para 2050, pone el foco en los jóvenes. Bruselas plantea que puedan empezar a sacarse el carnet de conducir de coches y camiones a los 17 años aunque quienes aprueben tendrán que conducir con acompañante hasta que cumplan los 18 años. El acompañante deberá tener al menos 25 años, contar con 5 años de experiencia al volante y no haber perdido el carnet al menos en los últimos 5 años. Se trata, según el Ejecutivo comunitario, de un sistema aplicado con éxito en el caso de los permisos B en Austria y Alemania que ha tenido “un impacto muy positivo” en la seguridad vial porque permite a los jóvenes conductores adquirir experiencia al volante bajo la supervisión de un adulto. Bruselas también plantea que los menores puedan acceder al carnet de camión para facilitar la formación de conductores profesionales.

Las nuevas reglas también introducen un período de prueba de al menos dos años para los conductores novatos tras superar el examen de conducir y una norma de tolerancia cero respecto al alcohol. Los conductores noveles estarán sujetos a normas estrictas sobre la conducción bajo los efectos del alcohol y los Estados miembros podrán definir restricciones adicionales. Se trata de un elemento "esencial", a ojos de Valean, ya que, aunque los jóvenes solo representan el 8% de los conductores de automóviles, dos de cada cinco colisiones mortales implican a conductores menores de 30 años. La propuesta también introduce la adaptación de la formación y las pruebas de conducción para preparar mejor a los conductores para la presencia de usuarios vulnerables en la carretera. Con esto esperan mejorar la seguridad de peatones, ciclistas, usuarios de patinetes eléctricos, y bicicletas eléctricas.

Por último, también plantea la introducción de un carnet digital válido en toda la UE para simplificar el reconocimiento de los permisos de conducción entre los Estados miembros. De esta forma, "será mucho más fácil sustituir, renovar o canjear un permiso de conducción, ya que todos los trámites se harán en línea". Para llegar a esta solución, la UE tendrá primero que llegar a un acuerdo sobre las especificaciones técnicas relativas a la interoperabilidad, seguridad y ensayo de los permisos de conducción móviles, incluidas las características de verificación y la interfaz con los sistemas nacionales.